El parlamentario por la provincia de Salta, Ernesto Aparicio, involucrado en la causa que investiga el asesinato de la productora rural, Liliana Ledesma, abandonó su cargo de legislador después de que la Cámara de Diputados provincial aceptara su renuncia.
Manuel Godoy, presidente de la Cámara de Diputados, manifestó que a pedido de Aparicio, luego de que se aprobara su dimisión, se remitieron copias del documento al juez de la causa, Nelson Aramyo, al gobernador Juan Carlos Romero y al Partido Justicialista.
De acuerdo a la agencia DyN, que tuvo acceso al comunicado de renuncia, Aparicio sostuvo que tomó esa decisión en forma "personal e irrevocable", porque considera que "la justicia debe tener la libertad de accionar contra todo ciudadano".
"En mi calidad de legislador debo rendir cuentas a la comunidad y llevar adelante todos los pasos necesarios para que se esclarezca el hecho en el que mediática y políticamente se me acusa", sostuvo Aparacio.
El diputado aclaró que "si bien la Constitución Nacional establece la presunción de inocencia, por mi función pública me veo obligado a demostrarla", mientras que añadió "no tengo temor en ser investigado, indagado o detenido, pues mi inocencia será, finalmente, comprobada".
El legislador, cuya hermana Gabriela Aparicio se encuentra detenida e imputada por el homicidio, aseguró ser "el más interesado en que se investigue hasta las últimas consecuencias, el delito".
Aparicio fue acusado por los familiares de Liliana Ledesma de ser uno de los posibles autores intelectuales del crimen, cometido el 21 de septiembre en una pasarela peatonal, en la ciudad fronteriza de Salvador Mazza.
La mujer y otros integrantes de la Asociación de Pequeños Productores de Madrejones denunciaron a Aparicio, propietario de grandes extensiones de tierra en la zona, por el cierre de caminos vecinales que les impedían acceder a sus terrenos.