La ministra de Capital Humano, Sandra Pettovello, dio este martes 15 de julio una extensa entrevista donde habló de diferentes temas, incluyendo las próximas elecciones en la provincia de Buenos Aires, su relación personal con el Papa Francisco, y su pelea con "los gerentes de la pobreza".
Consultada sobre si el oficialismo conseguiría buenos números en el Conurbano, la funcionaria se sinceró: “Yo creo que sí. Creo que dato mata relato. Si estos son los datos, la gente lo puede sentir, por ahí se puede dar una sorpresa". Los datos a los que hizo referencia durante la entrevista que le concedió a LN+ son las cifras positivas dadas por el INDEC: 1,6% de inflación en junio y 38,1% de pobreza a la baja en el segundo semestre de 2024 (también mencionó los cálculos de la Universidad Torcuato Di Tella, que prevén 31,6% para el primer semestre de este 2025).

La ministra explicó que no hubo un estallido social en el Conurbano al comienzo del gobierno de Milei porque se redirigió “en el Presupuesto, el dinero que se le daba a los gerentes de la pobreza, que se los daba el Gobierno a su vez, y se lo dimos a la gente sacando a los intermediarios. Le dimos los recursos a los que los necesitaban de verdad. La AUH aumentó 400%, 137% la Tarjeta Alimentar, y 1.400% la Asignación Mil Días”.
Tras asegurar que “el kirchnerismo dejó hambre”, Pettovello apuntó contra los “gerentes de la pobreza” (referentes sociales como Juan Grabois, Emilio Pérsico, Eduardo Belliboni y Daniel Menéndez) a los que acusó de “aprovecharse de los pobres en pos de tener poder y jugar de los dos lados del mostrador por un voto”. También reconoció que nunca los quiso atender, aunque recibió fuertes presiones de “políticos tradicionales” para hacerlo.
Sandra Pettovello echó a la funcionaria que compró una cafetera de $2 millones
La ministra recordó cuando la denunciaron por, supuestamente, haber guardado cinco toneladas de alimentos. “Los que me estaban denunciando a mí y los que hacían estas operaciones mediáticas eran los que querían esa comida que habían comprado, y la utilizaban para extorsionar a la gente. La querían porque creían que eran los dueños de esos alimentos”, dijo la funcionaria. Y a continuación hizo referencia a “los comedores fantasmas”: "44.000 comedores en el Renacom y el 70% no habían sido validados nunca. Había direcciones que no correspondían, un pool dance en uno de los lugares, un taller mecánico...”.
Pettovello aseguró que las marchas disminuyeron, en gran parte, porque el Ministerio les quitó fondos a los “gerentes de la pobreza”: "Eran las herramientas que utilizaban para traerlos a marchar y utilizarlos políticamente. Era el miedo también que tenía la gente de que le quitaran un bolsón de comida por no ir”.

La funcionaria recordó que “cuando yo vine a este Ministerio, empecé a descubrir estas cuestiones de gente que había estado en el Gobierno y que todavía tenía poder porque tenía gente metida adentro del Ministerio, y ellos se manejaban con otras lógicas. En toda la administración había una lógica de extorsión: en lugar de diseñar una política pública por el bien de la sociedad, buscaban hacer un negocio y tener una mordida. Y esto atravesaba a todo el Estado”.
Cuando le preguntaron si Cristina Kirchner conocía este tema, la ministra se negó a dar nombres, pero señaló que “era difícil que no se supiera”. Sin embargo, luego hizo una aclaración: “Está bien que uno a veces ocupa un puesto y en la enormidad que yo tengo es muy difícil que si hay una persona tendiendo un quiosco en algún lugar de mi administración, yo lo tenga que saber al minuto. Si yo me entero, no va a estar trabajando más”.
La ministra también aseguró que el sistema previsional estaba “quebrado” y explicó que, para hacer una reforma previsional “primero y fundamentalmente hay que hacer una reforma laboral”.

Su vínculo con el Sumo Pontífice
Finalmente, Pettovello también se refirió a su relación con el Papa Francisco, revelando que fue él quien pidió conocerla. La funcionaria remarcó que solía enviarle informes respecto a la situación social y confesó que, durante una charla, ella soltó un insulto y el Santo Padre le dijo: “¡Putee, putee!”.
La ministra aseguró que el Papa “pensaba lo mismo que yo”, y señaló que Francisco dijo que eran unos “HDP” cuando ella habló de los que le sacaban dinero a los pobres.
HM/DCQ