El gobernador electo de Santa Fe, Miguel Lifschitz, consideró que haber ganado la elección provincial "por una cantidad de votos exigua" no le resta "legitimidad al triunfo y tampoco capacidad de gestión ni de gobernabilidad", a la vez que garantizó que va a "construir consensos y acuerdos" con otras fuerzas para llevar adelante su administración.
Lifschitz realizó esta mañana una conferencia de prensa en el Teatro Municipal de la ciudad de Santa Fe, luego de que ayer finalizara el escrutinio definitivo de la elección del pasado 14 de junio, que determinó un triunfo del Frente Progresista Cívico y Social por 1.776 votos, sobre el candidato del PRO, Miguel Del Sel.
El mandatario electo afirmó que asumirá su cargo con "mucha tranquilidad y también con mucha humildad" porque "el resultado ha sido muy parejo entre tres fuerzas políticas", señaló en referencia al PRO y al candidato del Frente para la Victoria, Omar Perotti, que se ubicó tercero.
"Hemos tenido dignos rivales, difíciles, a los que hemos logrado vencer por una cantidad de votos exigua", subrayó, tras lo cual destacó que eso "de ninguna manera le resta legitimidad" al triunfo y "tampoco capacidad de gestión, de gobernabilidad para los próximos cuatro años", afirmó. En ese sentido, sostuvo que "el Frente Progresista va a garantizar la gobernabilidad, vamos a construir consensos, acuerdos con los referentes políticos de todos los partidos".
Lifschitz dijo haber recibido la felicitación de Perotti y Omar Martínez, los candidatos con los que compitió en la elección, "no así de dirigentes del PRO", dijo, aunque consideró que "seguramente lo harán cuando se terminen de confirmar los resultados" del comicio.
