Las abogadas de Marcela y Graciela Ledo, madre y hermana del soldado Alberto Ledo –desaparecido durante la última dictadura– habían pedido por tercera vez la declaración indagatoria del jefe del Ejército, general César Milani, en la causa que investiga el crimen y realizaban los trámites pertinentes a tal fin, cuando el fiscal Gustavo Gómez les informó que acababa de ser apartado de la causa.
Gómez, fiscal general de Tucumán, se encontraba reemplazando al fiscal federal Carlos Brito, quien había pedido una licencia temporal, y se encontraba evaluando el pedido de indagatoria. Pero el juez Daniel Bejas le solicitó que entregara de manera urgente el expediente Milani.
“Había comenzado a subrogar al fiscal Brito la semana pasada y en ese marco había tomado el expediente Milani para estudiarlo –cuenta a PERFIL el fiscal Gómez–. Días después las abogadas de la querella se reunieron conmigo en mi despacho para pedirme que cite a declarar a Milani. En ese momento el juez Bejas me informó que estaba apartado de la causa y al día siguiente se me indicó que el doctor Adolfo Bertini, defensor de Milani, había pedido mi recusación por falta de objetividad”.
De apuro. “Nos parece extraño que se lo haya recusado con tanta celeridad”, explica Graciela Ledo, querellante en la causa que investiga el papel de Milani en la desaparición de su hermano conscripto durante la dictadura militar. “Tal vez consideraron que Gómez iba a cambiar el rumbo de inactividad que le imprime el fiscal Brito a la causa y por eso lo apartaron”.
Temas calientes. Al mismo tiempo, el fiscal Gómez fue separado de las causas que investigan al ministro de Salud de la Nación, el tucumano Juan Manzur, por enriquecimiento ilícito. Otro expediente por irregularidades en el manejo de fondos públicos de la Municipalidad de Montero (que también involucra a la diputada nacional por el Frente para la Victoria María del Carmen Carrillo).
Y una tercera causa judicial por la que se investiga al intendente de Yerba Buena, Daniel Toledo.
“Al enterarnos de la simultaneidad de la recusación en todos esos expedientes, comenzamos a pensar que tal vez el apartamiento de Gómez de la causa Milani tenga origen en motivaciones políticas”, indica la abogada Adriana Mercado Luna, representante de la querella junto a Viviana y María Elisa Reinoso, que encima fueron acusadas penalmente por la defensa de Milani (ver recuadro).
“Toda la carga de prueba indica que Milani debe ser llamado a declarar para esclarecer su rol en la desaparición del soldado”, agregó la abogada. “Están protegiendo a Milani”, fue la interpretación que lanzó también Graciela Ledo. PERFIL intentó comunicarse con el juzgado y con el defensor de Milani, Adolfo Bertini, pero en ambos casos señalaron que no realizarían declaraciones.
Denuncia penal contra la querella
Las abogadas Adriana Mercado Luna y Viviana y María Elisa Reinoso, querellantes en la causa Ledo, fueron demandadas penalmente por Adolfo Bertini, defensor de César Milani, quien las acusó por hostigamiento y amenazas a un testigo favorable al jefe del Ejército.
“Rubén Páez es uno de los testigos que fue llamado a declarar por la defensa”, relata Mercado Luna.
“En su declaración, incurrió en contradicciones y vacilaciones que determinaron que lo acusáramos por falso testimonio. Luego de esa jornada, el testigo y nosotras las abogadas nos encontramos en el mismo ómnibus que nos llevaba de regreso a La Rioja, por obra de la casualidad”, continuó el relato Mercado Luna a este diario.
“Falsamente, nos acusa de haberlo seguido e insultado durante el viaje. Si prosperara la acusación de Bertini, podrían quitarnos nuestras matrículas y apartarnos así de la causa Milani”, sentenció la abogada.
La denuncia viene a sumar un nuevo capítulo a la larga novela de trabas y dilaciones que tiene el expediente judicial de Milani. Los elementos de sospecha sobre el jefe del Ejército provocaron que hasta el CELS, que preside Horacio Verbitsky, se pronunciara en contra del mandamás castrense.