Así es el mundo y así de complicada es la política económica. La semana que había empezado exhibiendo las diferencias en el Gobierno por un ida y vuelta en un aumento de combustibles que finalmente trocó a congelamiento para cuidar la estabilidad termina con el mundo sacudido por el asesinato de un alto rango iraní a manos de Estados Unidos que hace subir el petróleo y presiona sobre el precio de la nafta que se intenta contener.
Horas después de que se conociera que el Pentágono había matado a Qasem Soleimani, líder de la Guardia Revolucionaria iraní, el precio del barril de crudo aumentaba entre 3 y 5% en sus versiones Brent y West Texas Intermediate (WTI), de referencia en los mercados internacionales. Así, el primero, que marca el pulso en Europa, cerró a US$ 68,60, mientras que el que es referencia en mercados de Estados Unidos superó los US$ 63,05 por barril.
“Si el conflicto se centra en Irak, que es el segundo productor de petróleo y afecta sus envíos de crudo, el mercado se pondrá nervioso”, dijo a The Wall Street Journal el analista Giovani Staunuovo, del banco UBS. El principal foco de amenaza es que el ataque a Teherán derive en represalias en infraestructura petrolera de todo el mundo, como ocurrió con los ataques de yemenitas sobre una refinería en Arabia Saudita y complique más la situación, con nuevos incrementos del petróleo.
Momento. El aumento del petróleo y la tensión e incertidumbre en el mercado petrolero global se producen en momentos en que la Argentina intenta un plan de “estabilización macroeconómica”, como manifestó el jefe de Gabinete, Santiago Cafiero, al explicar por qué se frenó un incremento de la nafta del 5% que había requerido la petrolera de mayoría estatal y parecía tener vía libre hasta que desde el Poder Ejecutivo se frenó al menos por un mes. Ahí ya el pedido tenía que ver con un atraso en el precio de los surtidores que las principales empresas del sector ubican en un 10% respecto de lo que había aumentado antes el valor del barril y también el tipo de cambio antes de que se estabilizara en $ 63.
Si el incremento producto de la tensión global persiste, es de esperar mayores presiones para que se mueva el valor en las estaciones de servicio, donde la súper ronda los $ 54 y la premium se ubica arriba de los $ 63, al menos en la zona metropolitana.
Esta semana, además, el Gobierno había decidido postergar el incremento de impuestos que iba a impactar también en el valor de la nafta, todo con miras a frenar la inercia inflacionaria pero asumiendo importantes riesgos. Recuerdo un ejecutivo petrolero: el acuerdo social de 1973 voló por el aire entre otros motivos porque en aquel momento el crudo saltó 27% en un año.
Ultiman Precios Cuidados
El Gobierno ultima detalles del relanzamiento del programa de Precios Cuidados, que vence el lunes y tendría una nueva versión desde el martes.
La novedad, según trascendió, es que incluiría menos cantidad de productos pero más marcas líderes.
Según voceros del Ministerio de Desarrollo Productivo, el nuevo listado de consumo que incluirá el plan nacido en 2014 sumará unos 300 productos, contra los más de 550 que tiene en la actualidad. La diferencia, cuentan en el Gobierno, es que se privilegiaría las marcas líderes y no las segundas, que Cristina Kirchner bautizó “pindonga y cuchuflito”.
