Marcelo Tinelli mira números. Las planillas del rating -que lo están ubicando segundo en la franja horaria de su programa ShowMatch- dejaron de entusiasmarlo, pero recupera el ánimo cuando revisa los últimos sondeos de opinión sobre su figura. “Cuando dejo de mostrarme con políticos o dejo de hablar de política es cuando mejor visto estoy para una candidatura”, explica él mismo a distintos dirigentes con los que se ve en privado. Las elecciones 2019 se acercan y el conductor de televisión decidió dar el primer paso de la última jugada con la que busca convertirse en una opción presidencial ante un escenario de crisis económica.
La provincia de Buenos Aires es el terreno elegido por Tinelli para centrar el operativo que arrancó esta semana en La Plata y lo llevará a visitar un distrito por semana. Las recorridas tiene dos intenciones: palpar la reacción de los ciudadanos a los que visita ante una posible candidatura y sondear las reacciones de la política por sus movimientos. Después del recorrido por la empresa platense GoodEnergy el último martes, el hombre de Bolivar detalló de manera positiva su vínculo con la gente y vio como su celular no dejó de sonar, sobre todo, por mensajes de dirigentes que tratan de descifrar el futuro del conductor. Entre ellos, quien aprovechó para volver a escribirle fue el jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta. El conductor es crítico de la gestión de Mauricio Macri, pero conserva la buena relación con Larreta y la gobernadora, María Eugenia Vidal.
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Sin embargo, no le está yendo como quisiera con el peronismo. Tinelli siente que su alto nivel de conocimiento ya no alcanza para que las aspiraciones de políticos con números más bajos queden en el camino. Juan Manuel Urtubey, Sergio Massa y hasta Miguel Pichetto no estarían dispuestos a resignar su sueño presidencial para convertir a Tinelli en el candidato del espacio. Y el conductor no está dispuesto a competir en una interna, y también descarta armar un nuevo partido. Asegura que no tiene tiempo y prefiere colgarse de una estructura. Por eso, en su entorno aseguran que este nuevo impulso que hará en la provincia será el último antes de tomar la decisión de saltar o no a la política.
Tinelli se mide y prepara mensajes desde la pantalla
El vínculo con los ciudadanos lo hará a través de su fundación. Para potenciar las acciones que tienen que ver con construcción y reformas de escuelas, ayuda a clubes deportivos, contención social y lucha contra las drogas, y ayuda alimentaria a comedores comenzó a trabajar con la consultora Ballero, Landoni y Asociados. Tinelli quiere “devolverle a la gente lo que le dio al seguirlo a través de la pantalla” y se mostrará activo en esta tarea sin la necesidad de mostrarse con políticos ni hablar de política, tal como le recomendaron. Mientras, reniega de su rol al frente de ShowMatch y asegura, cada vez ante más gente, que es una etapa cumplida.
Otra vez a la carga
En junio de 2017, este medio contó que Marcelo Tinelli ya pensaba en cómo arrancar una candidatura presidencial silenciosa. En aquel entonces, el conductor de ShowMatch repetía que ya quedaba poco por hacer en la televisión por aire, que tiene cada vez menos encendido. Estaba convencido de que la oportunidad llegaría en 2019. Al dar las primeras señales, Tinelli se imaginó compitiendo contra Mauricio Macri con el apoyo del peronismo. Meses más tarde, visitó un comedor. “Tengo que salir del estudio de televisión e ir a visitar a los que tienen necesidades”, insistía. Un año más tarde, con el rating de su programa bajo, Tinelli vuelve a la carga. Quiere posicionarse ante un escenario de crisis y que un sector del peronismo lo apoye en la nueva aventura.
