Un día antes de la muerte de un hombre al caer una tribuna en el acto que participó la presidenta Cristina Fernández en Tucumán, en conmemoración del Día de la Independencia, la Dirección de Defensa Civil de la provincia había advertido que las tribunas montadas para el público no estaban en condiciones y que, por lo tanto, eran inseguras para recibir gente.
En efecto, en una nota fechada el 8 de julio, el ingeniero Carlos Humberto López, jefe del Departamento de Operaciones de la dependencia, elevó al subdirector de Defensa Civil el resultado del “relevamiento de las instalaciones del Hipódromo de Tucumán”, según informó el diario local La Gaceta .
El informe precisa respecto de las tres tribunas instaladas para el acto en el Hipódromo local: “ El estado y las uniones de los tablones de las gradas no ofrecen seguridad; arriostramiento longitudinal deficiente (flexadas, solapadas, uniones deficientes)”.
Precisamente, fue el derrumbe de una tribuna lo que mató a Juan Miguel Valdez, un hombre de 54 años, oriundo de la localidad de Tafí Viejo, al tiempo que hirió a otras 20 personas. Una muerte evitable que, en menos de un mes, se sumó a la de otra víctima tucumana que asistió a un acto de Cristina: un joven de 21 años que falleció al caérsele en la cabeza una farola en Plaza de Mayo.
El informe de Defensa Civil, hasta ahora silenciado, destaca algo más: “De las observaciones mencionadas anteriormente tiene conocimiento el señor Jefe de Policía de Tucumán, comisario general Hugo Sánchez, y el legislador (oficialista) Sergio Mansilla, quien manifestó se tomaran (sic) las medidas del caso, asegurando que las personas ubicadas en estos sectores estarán sentadas”.
“A partir de este informe de una dependencia del Ministerio de Seguridad Ciudadana, quedaría absolutamente descartada la hipótesis del accidente. Si se hubieran tomado las medidas pertinentes, la tragedia se habría evitado”, aseguró el legislador radical José Cano, que fue quien obtuvo la copia de la nota. Cano, adelantó que llevará la prueba a la Justicia.
