El clima entre el oficialismo y la oposición está en uno de sus peores momentos. Y el último debate del pasado viernes 31 de julio en el Senado, de manera virtual como viene siendo en pandemia, fue una clara muestra de ello, cuando el senador de Juntos por el Cambio Esteban Bullrich pidió la palabra para responder duras críticas que había recibido de José Mayans del Frente de Todos, y la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner pidió que le apagaran el micrófono. La reacción trajo más críticas desde la oposición, que vuelve a la carga para terminar con el formato virtual de sesiones y reclama volver al Congreso con protocolos por el coronavirus.
"Así no podemos seguir", cuestionó el ex ministro de Educación. "No tiene que ver con un senador al que se le quita la palabra erróneamente, porque Mayans había hecho consideraciones que yo creí equivocadas y no me dejaron construir mi argumento en 30 segundos, cuando nosotros hemos escuchado discursos de la ex presidenta de más de 40 minutos; lo más grave es el clima, y estamos sacando malas leyes por ese clima, eso es lo más grave de lo que está pasando", agregó Bullrich en diálogo con Radio Con Vos.
En ese marco, el legislador de la oposición citó el caso de Paraguay, donde utilizan el recinto de Diputados para sesionar y tener una distancia reglamentaria: "El Senado funciona en Diputados para poder mantener la distancia. Acá, serían 72 personas sentados en 257 bancas. Hay formas de buscar alternativas, pero no se pueden tratar temas tan trascendentes de esta manera", advirtió Bullrich.
Y señaló que "algunos creen que la mayoría te da la razón, que es justificativo para todo, y eso no es una democracia, es un hecho circunstancial. El que tiene el oficialismo tiene derecho a utilizarla, pero eso no te da el derecho a callar a otro".
"Cortale la palabra": Cristina Kirchner volvió a silenciar a un senador en pleno debate
Asimismo, reclamó a la expresidenta que en la Cámara Alta se deben discutir temas como "la pandemia, la reforma de la justicia o la situación económica", y preguntó si la expresión opositora no opina igual que el oficialismo, "¿va a ser apagada?".
Además, Bullrich apuntó a Cristina Kirchner al decir que dirige el Senado con "rencor y con odio" y que eso repercute en la actitud de senadores oficialistas.
"Me parece que están cayendo presos del clima que generaron otros. Rencor, odio, venganza, que está impidiendo que trabajemos bien. Si ves las comisiones, la interacción con Mayans es cordial, de aceptación de que el otro te sugiera cosas, pero tiene que ver con el clima. Si el que dirige tiene rencor y odio, eso puede permear en quienes está dirigiendo", concluyó.
El cruce había comenzado cuando Mayans criticó a la gestión de Cambiemos y la definió como una administración dedicada "al robo, la especulación y la usura", enfatizando una mención a Bullrich por las medidas que tomó cuando fue presidente de la comisión de Presupuesto durante el Gobierno anterior.
Esteban Bullrich: "Como oposición tenemos que poner límites sin perder los canales de diálogo"
Allí, Esteban Bullrich pidió la palabra para responderle: "La pedí porque fui mencionado específicamente por el jefe de la bancada oficialista, quien me acusó de no haber tenido intención de diálogo ni haber sido republicano", argumentó.
"Son un montón de acusaciones que caen en estas diatribas a las que nos tiene acostumbrados, lamentablemente, que hace que algunos senadores se rían. No sé de qué se ríen. Entre las barbaridades que se dijeron, dijo que la pobreza era culpa del Gobierno de Mauricio Macri. Ah, mirá...", añadió.
Y Cristina Kirchner lo interrumpió, pidió que le "corten el micrófono" y le aclaró a Bullrich que en este caso solamente tenía derecho a hablar para responder "en los términos en los que ha sido mencionado" y "no para reiniciar un debate" sobre otro asunto.
J.D. /