Dos de los detenidos por la quema de urnas en la localidad de Sargento Moya, durante los comicios provinciales de Tucumán, pertenecen a partidos de la oposición, según informó la fiscal a cargo de la investigación, Mónica Andrea García de Targa.
En declaraciones al diario Ámbito Financiero, la letrada dijo que se trata de cuatro personas que quedaron detenidas bajo imputaciones de “una serie de delitos por infringir normas del Código Penal, el Código Electoral y la Constitución provincial”.
Los aprehendidos son Hugo Alarcón, de 42 años y candidato a comisionado comunal por el Acuerdo para el Bicentenario (ApB), que impulsó al radical José Cano a la gobernación, su hermano Diego; un empleado comunal Roque "Cheli" Serpa y otro hombre de apellido Córdoba, y un cuarto, del que no trascendieron datos, informó este matutino.
“Básicamente, interrumpieron un acto eleccionario. La gravedad la definirá el juez”, explicó la fiscal. “Hubo resistencia de parte de ellos. El Ministerio Público seguramente pedirá la detención y la fiscal tiene 10 días hábiles para producir los medios probatorios y definir si pide la prisión preventiva antes de que lleguen al juicio oral”, siguió.
Las personas fueron detenidas ayer por la quema de dos urnas en la localidad tucumana de Sargento Moya, a 50 kilómetros de esta capital, lo que obligó a la suspensión de los comicios provinciales en ese distrito.
La Junta Electoral de Tucumán suspendió los comicios en Sargento Moya, a causa de este incidente, y anticipó que se realizarán comicios complementarios, que estarán enfocados en la elección del comisionado comunal de este distrito que tiene un padrón electoral de 558 personas.
La quema de urnas se produjo al mediodía en las afueras de la escuela Francisca Bazán Laguna, donde se instalaron este domingo las únicas dos meses de votación del pueblo.
Según relataron los testigos y autoridades electorales, alrededor de las 13, cuando se fueron a almorzar los dos policías y los dos gendarmes que custodiaban el colegio, llegó al lugar un grupo de más de 30 personas, indicaron al diario La Gaceta de Tucumán.
"Se dirigieron hacia nosotras, tomaron sorpresivamente las urnas y salieron corriendo hacia el costado del establecimiento, no lo podía creer", relató Marcela Robles, presidenta de la mesa 1.62.