Un peritaje caligráfico demostró la existencia de "leyendas agregadas y enmendadas" en uno de los denominados "Cuadernos de las coimas". La escritura fue realizada, según la pericia de la División Scopometría ordenada por el juez Marcelo Martínez de Giorgi, por Jorge Bacigalupo, un expolicía y amigo del exchofer del Ministerio de Planificación Federal Oscar Centeno, que tuvo en su poder los cuadernos que derivaron en la apertura de la causa sobre supuestas coimas en el gobierno kirchnerista.
"La letra de las sobreescrituras en el caso denuncias por el empresario Armando Loson, es de Bacigalupo", informaron fuentes judiciales. Se informó además que tras recibir el informe, el juez Martínez de Giorgi ordenó la extracción forense de los dispositivos móviles y electrónicos secuestrados en casa de Bacigalupo el día que lo allanaron en el marco de esta investigación.
La causa de los "cuadernos de las coimas", que se encuentra elevada a juicio oral, se inició a partir de las anotaciones de Centeno, que destapó en julio de 2018 un escándalo de supuestos sobornos para obtener contratos en la obra pública, implicaron a Cristina Kirchner y una docena de sus ex colaboradores y a una veintena de empresarios de las más importantes compañías del sector de la construcción en Argentina, desde la multinacional Techint hasta la compañía IECSA, que perteneció al grupo de la familia del expresidente Mauricio Macri.
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Según las anotaciones de Centeno, altos ejecutivos entregaron durante más de diez años (de 2003 a 2015) una cantidad incontable de bolsos con millones de dólares en efectivo a funcionarios de los gobiernos de Néstor y Cristina Kirchner para asegurarse de ganar las licitaciones de obras públicas. La mayor parte de los empresarios se acogió a la figura de "arrepentido" para conseguir la excarcelación a cambio de su colaboración con la justicia y, en sus confesiones, dijeron que los fondos habían sido aportes a las campañas electorales de los Kirchner.
Qué encontró el peritaje
De acuerdo al informe perital, de 23 carillas, se comparó la caligrafía presente en los cuadernos de la investigación con un archivo de la Caja de Retiros, Jubilaciones y Pensiones de la Policía Federal Argentina, donde se encontraba el legajo de identidad de Bacigalupo y un expediente, que consta con escritura manuscrita del peritado.
"Con las limitaciones detalladas tanto en lo atinente al materian indubitado como el dubitado se infiere que formalmente surge la intervención del señor Jorge José Bacigalupo en la confección de las leyendas agregadas y enmendadas existentes en Cuaderno 7", señala una de las conclusiones del estudio. Allí, los peritos hicieron referencia a las palabras "Armando", Alem 855" e "Ing. Ferreyra", que aparecen enmendadas.
También se trabajó a partir de constancias manuscritas secuestradas en el domicilio de la calle Moldes, en la ciudad de Buenos Aires, obtenido en el allanamiento de la vivienda, domicilio de Bacigalupo, que comprendía "agendas, anotadores y papelería varia" y se obtuvo a "los fines de establecer el carácter o no de indubitado de los mismos", informó Télam.
A eso se sumó un "cuerpo de escritura obtenido en sede tribunalicia" durante el transcurso de este año, donde se verifica que "las características morfológicas se mantienen al igual que las combinaciones de signos del modelo cursivo con el de imprenta".
En estas muestras se encontró la "enmienda en algunos signos literales tales como la “y”, “r”, “n”, tachaduras, varianzas de inclinación, presionado", que indicaría "falta de espontaneidad" que "puede ser atribuido a un estado de nerviosismo del acto propio", de acuerdo al documento firmado por el Comisario Alejandro Matías Centofanti, Jefe de la División Scopometría, la Inspectora Analía Noemí Ojeda y los peritos de parte Guillermo Latour, Gastón Latour y Jorge Baz.
El problema de los originales que no están
Por otra parte, el informe destacó que el trabajo a través de muestras fotográficas, "pese a tratarse de muestras obtenidas de los cuadernos originales, imposibilitan a los peritos adentramos en el estudio" de los escritos, que "solo pueden ser analizados en el sustrato original". "En consecuencia, si se contara efectivamente con el material original para la examinación, sería posible recabar una mayor cantidad de elementos valorativos que permita elevar el grado de asertividad en el colofón presentado", amplía.
La justicia federal ordenó el allanamiento de la casa de Jorge Bacigalupo el pasado 11 de marzo, en busca de determinar la existencia de irregularidades denunciadas por el empresario Armando Loson tras un peritaje caligráfico privado de los cuadernos que reportaba intervención sobre los manuscritos "No puede descartarse una posible participación del nombrado en las alteraciones y/o modificaciones de los manuscritos modificados, cuya sospecha habilita a indagar en la recolección de otras pruebas válidas para el éxito de la investigación", sostuvo Martínez de Giorgi.
Bacigalupo y su "falta de espontaneidad"
Otro de los aspectos que resalta el informe pericial es la "falta de espontaneidad" de Bacigalupo cuando fue citado en sede judicial con el objetivo de obtener su cuerpo de escritura. Con el objetivo de tener una fuente más de comparación, el ex policía se sentó a escribir en el Juzgado de Martínez de Giorgi, y la PFA analizó esos trazos.
De acuerdo a la pericia, se destacó de esos manuscritos "una notable magnificación de las grafías en relación con las verificadas en el documental policial". Señalaron allí el "repaso o enmienda en algunos signos literales tales como la 'y', 'r' y 'n', tachaduras, varianzas de inclinación, presionado, como de magnificación y compresión de palabras".
Todo ello, de acuerdo a los peritos, resulta "indicativo de falta de espontaneidad en su concreción" que "si bien puede ser atribuido a un estado de nerviosismo del acto propio, resulta destacable y pasibles de mención en las variaciones ejecutivas desplegadas a lo largo de la formación de dicho cuerpo".
ds
