El jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, volvió a insistir hoy en que era "basura" y una "burda operación de prensa" la posibilidad de que el fallecido fiscal federal Alberto Nisman hubiese evaluado pedir la detención de la presidenta Cristina Fernández de Kirchner poco después de que la fiscal Viviana Fein, a cargo de la causa que investiga la muerte del funcionario judicial, corroborara la existencia de los borradores de la denuncia.
"Lo que queda claro es que la denuncia no tiene ningún tipo de asidero, es una burda operación de prensa con el objeto de ocultar la estrategia de desplazados grupos de inteligencia", defendió Capitanich en la conferencia de prensa en la Casa Rosada.
Sin retractarse de su actuación de ayer, el Jefe de Gabinete manifestó: "Esto de ir y buscar en la basura respecto de eventuales escritos no tiene ningún tipo de sentido ni asidero". La conferencia de prensa duró poco, dado que el funcionario se fue antes sin responder a las preguntas de los periodistas.