En plena búsqueda internacional para sumar en el mediano plazo opciones a la lista de vacunas contra el Covid habilitadas en Argentina, la ministra de Salud, Carla Vizzotti, visitó Cuba donde se reunió con el presidente Miguel Díaz-Canel Bermúdez. La ministra viajó a la isla con la asesora presidencial Cecilia Nicolini, ya que juntas configuran la dupla que se ha ocupado de las principales negociaciones por vacunas desde el inicio de la pandemia de coronavirus.
El objetivo del viaje a Cuba fue interiorizarse sobre el avance en la elaboración de las vacunas Soberana 02 y Abdala, dos de las cinco alternativas en las que está trabajando el país caribeño. La alternativa Soberana 02 finalizó en la última semana la fase 3 de ensayos clínicos, mientras que la Abdala lo hizo a finales de abril pero aún no cuentan con la aprobación definitiva. No obstante, ya fueron inoculadas a más de un millón de personas que forman parte del personal de salud o de grupos de riesgo que se inscribieron de manera voluntaria. Es que Cuba no forma parte del mecanismo Covax que distribuye vacunas a nivel mundial para los países con menores posibilidades ni tampoco negoció la compra con Rusia y con China, con lo que trabaja a contrarreloj para alcanzar una alternativa propia de inmunización.
“Hablamos del proyecto común y de trabajar no sólo para poner en valor una vacuna totalmente desarrollada, producida y aplicada en Latinoamérica, sino también hacerlo en otros ejes de lo que es salud y la ciencia y tecnología”, comentó Vizzotti al término del encuentro con Díaz Canel.
La funcionaria precisó que Argentina “está trabajando fuerte para estrechar los lazos, acceder a la vacuna, pero sobre todo colaborar en todo lo que pueda, tanto desde lo que es la provisión de insumos, la posibilidad de la compra y el apoyo para escalar la producción y avanzar con nuestra entidad regulatoria y la de Cuba estudiar los análisis interinos de Fase 3 y ampliar la posibilidad de investigación en escenarios como nuestro país, que le puede dar un rol a la vacuna también muy interesante”. La mención de Vizzotti está ligada al reclamo de Cuba para que se flexibilice el bloqueo impuesto por Estados Unidos que impide la llegada al país de al menos 20 millones de jeringas para aplicar las vacunas a la población y de otros insumos vitales para el proceso.
Vizzotti explicó que poner en valor la vacuna abarca “desde la investigación básica hasta la producción y cerrando el círculo virtuoso aplicándosela a la población, de cómo la gente recibe con mucha esperanza la vacuna, como en la Argentina”. Según lo que explicó la ministra, una de las alternativas es que Argentina se sume a la posibilidad de avanzar con las investigaciones en el país, con lo que en lo continuarán las conversaciones bilaterales.
Desde La Habana, Díaz Canel le hizo llegar al presidente Alberto Fernández una invitación para que visite Cuba cuando “un porcentaje muy importante de la población ya esté vacunada en ambos países”, dijo.
Antes de la visita a Cuba, Vizzotti y Nicolini estuvieron en México para seguir de cerca la producción y liberación de la vacuna de AstraZeneca que se produce en forma compartida por ese país y Argentina y que comenzará a llegar en los próximos días.