Jaime Botín es banquero y tiene, según Forbes, una fortuna de 1850 millones de euros. Eso lo ubica en el puesto 14 de los más ricos de España. Botín es en ese país sinónimo de banquero: Jaime es hermano Emilio Botín -fallecido en 2014- hizo del Banco Santander uno de los más importantes del universo financiero incluso fuera de España. Y Jaime fue hasta 2002 presidente de Bankinter. Pero hoy lunes, en Madrid, Jaime Botín no estuvo sentado de ningún gran escritorio ni en una reunión de directorio, sino ante la Justicia española donde enfrenta un juicio por “presunto” contrabando de "Cabeza de joven mujer", obra de Pablo Picasso.
Remate bloqueado. En 1977, el banquero Jaime Botín compró en Londres el cuadro que Picasso pintó en 1906, para sumarlo a su colección privada. Hoy la obra de Picasso está valuada en 26,2 millones de euros. El Ministerio de Cultura de España declaró "inexportable" la obra cuando en diciembre de 2012 la casa de remates Christie’s gestionó ante el gobierno español el permiso para subastarla en su sede londinense. Botín buscó que el Ministerio de Cultura español revirtiera la “inexportabilidad” de “Cabeza de joven mujer” y argumentó que el cuadro de Picasso pertenecía a la empresa panameña propietaria de Adix, el velero donde la obra estaba montada. Finalmente en mayo de 2015 Botín no logró su objetivo y se determinó que él era el dueño del cuadro de Picasso y que aunque el barco tiene bandera británica, su base es el puerto de Valencia y por lo tanto, legalmente, está sometido a la ley española.
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Incautado en fuga a Suiza. La cuestión se complicó tres meses después, en julio de 2015, cuando se descubrió que el cuadro de Picasso estaba “en tránsito” a Ginebra (Suiza), en Calvi, el puerto de Córcega. Según explicó Botín, lo llevaba a Suiza por cuestiones de seguridad dado que se había filtrado en algunos medios que su velero Adix, contaba con la obra, y que como él y su familia estaban de vacaciones a bordo querían evitar contratiempos. Pero como en un película policial, la autoridades de Aduana francesa interceptaron el barco porque había una sospecha de que el cuadro de Picasso se iba a exportar por vía aérea desde Córcega a Suiza. Botín explicó que finalmente no hubo traslado a Ginebra para no ir contra la prohibición del Ministerio de Cultura español. La obra finalmente terminó por decisión judicial en el Museo Reina Sofía.
Prisión y multa millonaria. Ahora la fiscalía española pide cuatro años de prisión y multa de cien millones de euros para Jaime Botín por el delito de contrabando de bienes culturales. En la audiencia del lunes 4 d noviembre, Botín reconoció que su intención siempre fue que la obra se subastara en Christie’s en febrero de 2013. Sobre todo cuando éstos le dijeron -agregó- que había pocas posibilidades que el estado español destinara en ese entonces, 26 millones de euros para sumar otro cuadro de Picasso al patrimonio nacional. Las vueltas de la vida y de la ley, posibilitan ahora que el cuadro “Cabeza de mujer joven” sí pueda pasar a ser propiedad del Estado español en caso que Jaime Botín resulte condenado.
