Tanto años coqueteando con “no sé si este será mi último año”, y un día, después de dos años sin pantalla, obligada por la pandemia del coronavirus, Mirtha Legrand lo único que manifestó, a medida que el almanaque de 2022 se iba quedando sin hojas, fue su necesidad imperiosa de regresar a los sets de televisión. Y Facundo Manes le sugirió a la conductora –con mucho tino y, sobre todo, mucho afecto– que lo mejor que podía hacer era lo que más le gustaba: trabajar. Es decir, regresar a su clásico televisivo. Y a El Trece, la única opción viable para el deseo de Mirtha. Además, desde lo económico América no lo era dada la situación financiera de esa emisora, y la pantalla de Viacom/Telefé no tenía espacio disponible.
La edad, que parece ser un hecho central para muchos, es un detalle para una mujer que como dijo siempre, es “gánica”. Esto es, según la explicación que dio la conductora de ese neologismo, ella tiene ganas de todo: de salir, de verse con amigos, de leer, de conocer, de informarse…, y también de no ser olvidada. Algo que seguramente no sucederá.
Una carrera que pasó del cine a la televisión, espacio en el que inauguró un formato que, al menos en Argentina, Mirtha Legrand tiene el copyright. El resto fueron réplicas de esa estructura, tuvieron mayor o menor suceso, pero nunca la constancia que, en el caso de Mirtha, habilita sin duda su ingreso al Guinness de los récords.
Al aire, grabado. Y hoy finalmente El Trece emite el primer programa del ciclo 2022 de Mirtha Legrand, dando así por cerrado el derrotero que tuvo de protagonistas a Ignacio Viale (hijo) –productor de su abuela Mirtha–, a Adrián Suar e, incluso, a Carlos Rottemberg, quien se sumó como mediador a pedido de la conductora.
El esquema será el mismo, y si bien los invitados forman parte importante de la nueva puesta escena, la expectativa la genera la presencia de la conductora. ¿Cómo se manejará frente a las cámaras después de dos años fuera de la televisión? ¿Dejará hablar a sus invitados o la abstinencia de pantalla hará de la mesa más un soliloquio que un espacio de diálogo? Como sea, todo estará cuidado y, por eso, no irá en vivo; el programa se grabó ayer por la tarde, después de la grabación del de Juana Viale, quien, como su abuela, regresa, pero solo los domingos al mediodía.
