Es una de las residencias más imponentes de zona norte. En los últimos años, por ejemplo, en sus jardines, empresarios y personajes de la política, la cultura y el espectáculo asistieron a dos de las fiestas más importantes que realizó una bodega de nombre francés. La propiedad, llamada Villa Martínez o Palacio Kavanagh, fue construida en 1943 por los hermanos Minvielle a pedido de Corina Kavanagh, la misma que erigió el emblemático edificio ubicado frente a la Plaza San Martín.
Hace un año, la propiedad fue puesta en venta por sus ahora ex dueños: el gobierno francés. Durante más de dos décadas, fue residencia privadas de los sucesivos embajadores del país galo en la Argentina. Aunque en un momento se habló de que esta venta formaba parte del desprendimiento de propiedades onerosas para el Estado francés, fuentes de la embajada informaron a PERFIL que el motivo de la venta fue otro. A raíz de la densificación urbana del Gran Buenos Aires, la residencia quedó lejos de Recoleta, donde funciona la oficina del embajador, y el trayecto cotidiano provocaba demoras operacionales. “Una nueva residencia, conforme tanto a las necesidades de una representación moderna como a la estructura urbanística del Buenos Aires actual, será adquirida en los próximos meses”, detalló a PERFIL una fuente de la embajada. Mientras tanto, el actual diplomático ocupa un cómodo departamento a metros de la embajada, en Recoleta.
Quien aún no se sabe si se mudará a Villa Martínez es su nuevo dueño: Alfredo Román. Este empresario habría pagado los 14 millones de dólares que el gobierno francés pedía por la propiedad.
El terreno tiene una dimensión de 17.915 metros cuadrados; 2.036 corresponden a la mansión propiamente dicha, que comprende tres plantas y un subsuelo. En el inmenso jardín de tres niveles que descienden hacia el Río de la Plata, se ubica el sector de la piscina, que incluye una construcción con living comedor y chimenea, cocina y dos dormitorios en suite.
Rumores. Alfredo Román, conocido también como “el Zar de las Grúas”, tiene 70 años y es el mayor de cuatro hermanos. Sus orígenes fueron humildes, y de tener su primer camión a los 18 años pasó a ser líder del transporte pesado en Argentina en los años 70. Desde ese momento, su crecimiento empresarial ha sido continuo y diversificado. Y con la puesta en marcha de Exolgan, la terminal de contenedores ubicada en Dock Sud, Alfredo logró concretar uno de sus mayores sueños.
La compra de Villa Martínez generó temor entre los vecinos de zona norte sobre el destino final de la propiedad, ya que hace un tiempo una inmobiliaria ofrecía un posible fraccionamiento del terreno, y como la mansión no cuenta con la “protección” que le brindaría la categoría de patrimonio histórico, podía terminar siendo derrumbada. Por este motivo PERFIL consultó a allegados a la familia Román, quienes aseguraron que no está en los planes del empresario demoler esta lujosa mansión.