En las últimas 48 horas Marcelo Tinelli dejó ver sus ganas de comenzar una carrera en la política. Primero fue su paso por la provincia de Tucumán, donde se reunió con Mario Leito, candidato a intendente del PJ por la ciudad capital, y con el gobernador Juan Luis Manzur. “Nunca descarté la posibilidad, vivo como todos los argentinos esta situación difícil y tenemos que estar con los más pobres”, dijo sobre una posible candidatura. Además habló de varios temas sociales aunque no mencionó la legalización del aborto como uno de ellos. Tanto su mujer, Guillermina, como sus hijas pidieron por la ley y en una provincia “pro vida” como Tucumán donde se incumplió con la ILE recientemente en un caso de violación a una nena de 11 años se esperaba que quizá se pronunciara al respecto.
De todas formas el recorrido político continuó con algunas entrevistas y respondiéndole a Dante Sica, ministro de Producción, a través de sus redes sociales. “La gran mayoría de la gente está preocupada. Es imposible producir en nuestro país, generar empleo, atraer inversores y lograr que aumente el consumo”, escribió en redes.
Lejos de conformarse, ayer por la mañana volvió al ruedo en una entrevista con Marcelo Bonelli. “Macri y Cristina se necesitan el uno al otro. Estamos enfrascados en esto. La gente dice que no estamos bien pero ‘antes de que vuelva ella’... Me gustaría que votáramos pensando que esto se puede mejorar”. También explicó su pensamiento sobre las próximas elecciones. “No sería bueno una reelección de Macri si todo va a ser ajuste. Me gusta más cuando está rodeado de Horacio Rodríguez Larreta o de María Eugenia Vidal, que le aportan una mirada más social”, señaló, y aprovechó para diferenciarse de los dos candidatos que hoy son más fuertes para octubre próximo. “La grieta nos metió a todos adentro y no es algo personal con el Presidente. Tengo una buena relación con él. Tampoco es personal con Cristina, con quien no tengo relación. Solo digo que la grieta, un juego electoral perverso, hace que estemos todos los días cada vez más complicados”, finalizó Marcelo Tinelli, que solamente dejó la política de lado un rato el viernes por la noche cuando vio en primera fila el desfile 2019 de la marca de zapatos de su mujer, Guillermina Valdés.
