La mujer de Jorge Lanata, Sara Stewart donó su riñón a una persona desconocida como parte de un trasplante renal cruzado, y para que el periodista recibiera el riñón de otra persona. Se sabe que la mujer es adepta a los deportes y le gusta, entre otras actividades físicas, hacer running. De hecho, ha participado de varias carreras. Con esta operación no tendrá que dejar de hacerlo, y podrá seguir una vida normal. Incluso desde el deporte. “Puede ir al gimnasio y seguir corriendo. Eso sí, no estará en condiciones de hacer actividades que impliquen golpes o sean de alto impacto, como kickboxing, paracaidismo o hockey, por dar solo algunos ejemplos. El resto será todo normal”, explicó a PERFIL el doctor Cormillot.