Un informe de Jordan Kristoff dijo que después de casi 4 años de intervención, la inmobiliaria de la familia Kirchner tiene un pasivo de 10 millones de pesos. Son varios los terrenos que están dentro de este reporte que reveló Lucía Salinas en Clarín: dos departamentos en Puerto Madero que no se pueden alquilar. Uno de ellos es el que ocupó recientemente la esposa de Fabián De Souza. A esto se le añaden cuatro propiedades que hay en Río Gallegos que están usurpadas.
En la justicia hay reclamos no sólo por la usurpación sino también por las órdenes de desalojo que, por la pandemia, no se han llevado a cabo.
La vicepresidente y sus dos hijos están investigados por el Tribunal Oral Nª 5 por lavado de dinero. Es en este marco en el que la justicia decidió intervenir la inmobiliaria de los Kirchner.
“Sin libros contables, con balances adeudados hace años y los números existentes bajo sospecha”, fue la manera que el interventor Jordan Kristoff describió el estado de la inmobiliaria de los Kirchner, Los Sauces S.A. El administrador judicial presentó su último informe con la deuda mencionada, departamentos usurpados y otros sin poder alquilar. Ahora la firma volverá a manos de la vicepresidenta y sus hijos, todos procesados por lavado de dinero.
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Además, al auditor judicial le resultó imposible reencausar comercialmente el emprendimiento que dejó expuesta a la familia de la vicepresidente. En julio de 2020 el interventor detalló que los activos y el pasivo de Los Sauces S.A no se corresponden. Por ello, también consideró que la inmobiliaria se utilizó para blanquear fondos simulando alquileres lo que le permitió el ingreso al patrimonio familiar de 30 millones de pesos aproximadamente.
La acusación del fiscal Gerardo Pollicita a la familia Kirchner fue enviada a juicio oral, junto a los Báez, Cristóbal López, Fabián De Sousa, Osvaldo Sanfelice y Romina Mercado, entre otros.