La situación en Paraguay cada vez se torna más compleja. Es que tras el asesinato de las dos hermanas argentinas, en un campamento del Ejército del Pueblo Paraguayo (EPP), a manos de un grupo guerrillero, le siguió el secuestro del ex vicepresidente de Paraguay, Óscar Denis de 74 años. Para su liberación, el Ejército del Pueblo Paraguayo (EPP), exige dos millones de dólares y la libertad de dos jefes condenados de la agrupación.
El ex funcionario desapareció junto a su asistente Adelio Mendoza Benítez, cuando estaba por llegar a una estancia ubicada al norte del país, a 40 kilómetros de donde fueron asesinadas las dos hermanas argentinas de 11 años. La familia de Denis alertó sobre la desaparición del ex funcionario ante los reiterados intentos fallidos para dar con su paradero.
Escala la crisis por el asesinato de niñas argentinas en operativo militar en Paraguay
El presidente del Partido Liberal, Efraín Alegre responsabilizó al presidente Mario Abdo Benítez por "su torpeza e inutilidad" frente al caso y exigió la "inmediata destitución" del ministro de Defensa. Frente a la situación, Abdo Benítez pidió ayuda a Colombia e informó que expertos colombianos enviados por Bogotá se encuentran en el lugar del secuestro, en Concepción, para ayudar en la investigación del suceso.
Mientras tanto, el domingo cientos de ciudadanos se movilizaron con banderas blancas, patrias y el lazo simbólico de la paz, bajo el lema Paraguay sin EPP, como muestra de apoyo a las familias víctimas del nuevo secuestro cometido.
El grupo armado rural EPP opera en Paraguay desde 2008 y se le atribuyen 15 secuestros y más de un centenar de asesinatos, entre ellos los de una veintena de policías y una decena de militares.