En medio de la pandemia que mantiene en vilo al mundo, fueron notificadas múltiples fiestas clandestinas y aglomeraciones de jóvenes, en paralelo al aumento de casos de coronavirus que se registra en el país. Para analizar el contexto, del relajamiento de medidas sanitarias, RePerfilAr, habló con el psicoanalista y columnistas de este medio, José Eduardo Abadi, quien aseguró que "estamos frente a una situación compleja, y dramática", y sugirió que "hay que lograr empatizar con los jóvenes y explicarles que el cuidarse a ellos y cuidar al otro es indispensable para poder convivir".
En ese sentido, el especialista explicó que "hay que hacer un trabajo de comunicación", pero "no solo de información, sino de diálogo y explicación". Sin embargo, advirtió la importancia de operativos de control. "Tiene que haber una vigilancia adecuada y una sanción, es decir, tampoco podemos permitir que frente acontecimientos que ponen en peligro la salud de la comunidad, una pasividad ingenua", agregó.
Cumbre de Kicillof con intendentes en pleno pico de fiestas clandestinas
En ese marco, el psicoanalista, reflexionó que como consecuencia de la pandemia, los jóvenes fueron uno de los grupos etarios más afectados, que vivenciaron situaciones de "angustia y soledad", movilizados por la fantasía de que "esto dura para siempre". No obstante, puntualizó que en muchos casos, la angustia puede llevar también "a minimizar y negar el peligro", que conduce a protagonizar "conductas irresponsables que tienen no solamente a ellos como a víctimas, sino a todos".
Asimismo, Abadi remarcó que "lo inédito y sorpresivo" de esta pandemia es "ir aprendiendo a lo largo de la experiencia". Y añadió: "Algunas cosas se hicieron bien y otras mal, y esto tuvo sus consecuencias, de las que algunas se han tratado de ir corrigiendo".
Martín Yeza: "Suspendimos 30 fiestas clandestinas en Pinamar"
Por último, el especialista enfatizó que para que funcionen las medidas sanitarias que dispuso el gobierno, como fue el aislamiento social preventivo y obligatorio, "tiene que haber comunidad". "Tiene que haber vínculos, registro del otro, una normatividad que nos reúna a todos, y confiabilidad. Que haya una noción clara de que cuidar al otro es cuidarse a uno, y descuidarse es peligroso", acentuó.
