En una escuela de Colonia Liebig, Corrientes, ocurrió algo que excede muchos límites: un grupo de estudiantes que se sentía presionado por las exigencias de una profesora resolvió vengarse poniéndole pastillas de Valium (diazepam) dentro de su termo. La víctima, la docente de biología Paula Correa, se descompensó poco después y debió ser internada.
Todo ocurrió en el colegio Antonio Biale de la ciudad correntina. Un grupo de alumnos metió tres pastillas de sedante dentro del termo de la profesora de 37 años y gracias a que una estudiante alertó a la rectora de la institución lo que había ocurrido se evitó una tragedia.
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“En sede policial la madre de la menor acusada confirmó el hecho pero aclaró que la idea fue de otro alumno. Su hija le dijo que la idea del compañero era ponerle veneno de rata, para mí es un atentado, un intento de homicidio”, dijo Hugo Correa, el papá de la docente.
“La chica le dijo que hicieron eso porque es una profesora muy exigente”, explicó al medio Primera Edición.
“Ella estaba tomando evaluación y en un momento se va a rectoría a buscar una planilla y queda su equipo de mate en el aula; luego vuelve y sigue con su clase. Después la alumna que colocó las pastillas comenta en el recreo que puso tres píldoras de Valium (diazepam) en el mate y eso es escuchado por otra estudiante que gracias a Dios fue y le contó a la rectora. Mientras tanto mi hija aún no sabía nada”, relató el padre.
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Cuando le contaron a la docente lo que había ocurrido, llamó a su padre para que la fueran a buscar. De la escuela fue a la comisaría a relatar lo que le habían hecho y luego tuvo que ser llevada al hospital porque se descompensó. Allí le hicieron un lavaje de estómago y quedó internada hasta la noche.
“A mitad de camino se desvaneció, por suerte estaba yo para llevarle urgente al hospital, porque llegó desmayada. Si ella volvía sola en la ruta se iba a matar, porque viaja sola en la ruta de noche”, contó el padre.
La reacción de la institución educativa
Tras lo ocurrido, tanto la familia de la docente como gran parte de la comunidad educativa lamentó el comunicado que emitió la institución donde piden que “la comunidad no se haga eco en lo trascendido”.
Por otro lado, la familia de la profesora contó que desde la escuela solo le dijeron a Paula Correa que se tomara licencia hasta fin de año, pero que nadie se acercó o se puso a disposición de ella tras el ataque.
RB/ff
