SOCIEDAD

Aprueban un plan para salvar a la Richmond

La Legislatura porteña declaró como sitio histórico a la confitería. El proyecto para conservar el emblemático edificio y la disputa.

Archivo. La Richmond cerró sus puertas en 2011. Ese año se emitió un amparo que impedía su modificación sin la autorización del Ministerio de Cultura de la Ciudad.
| Cedoc

La tradicional confitería Richmond, establecida en el centro porteño desde 1917, fue declarada hoy Sitio de Interés Histórico de la Ciudad días después de conocerse que podría cerrar sus puertas.

Los legisladores aprobaron, tras consensuarlo con el bloque PRO, un proyecto basado en las iniciativas impulsadas por los diputados María José Lubertino, Gabriela Alegre, Juan Cabandié, Raúl Puy y Eduardo Epzsteyn.

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La confitería fue protegida por sus características históricas, arquitectónicas, artísticas y urbanísticas, resaltó el texto aprobado en el recinto. 

El cuerpo parlamentario también votó la colocación en el frente del café de una placa de mármol que destacará su condición de bien del patrimonio cultural: "Por su valor simbólico e identitario en la Ciudad de Buenos Aires".

Con la sanción proyecto, los legisladores porteños dieron el primer paso para la recuperación de este lugar de encuentro histórico, porque esta iniciativa impide a sus actuales propietarios cambiar el rubro.

Pese al respaldo legislativo, Lubertino pidió mantener la organización de un abrazo simbólico previsto para mañana, a las 19, en el local, en procura de evitar su cierre.

La movilización fue promovida por la Comisión de Preservación del Patrimonio Histórico y Cultural de la Ciudad y la agrupación #54bares, que defiende la continuidad de los llamados Bares Notables.

La confitería Richmond está ubicada en la calle Florida 468, entre la avenida Corrientes y Lavalle, posee dos pisos y una superficie de 1.500 metros cuadrados.

Ahora, si el dueño quiere vender el local, deberá tener el visto bueno del Ministerio de Cultura porteño. Sin embargo, quedaron temas por debatir. Por ejemplo, cómo y quién compensará económicamente a sus dueños en caso de que la venta no se concrete.