SOCIEDAD

Atroz abuso de cuatro argentinas en Bolivia

Una de ellas está muy grave. Fueron drogadas por el dueño de un negocio de hamburguesas en Villazón.

La frontera entre Villlazón y La Quiaca: el paso internacional que divide Argentina de Bolivia.
| El Libertario

Cuatro estudiantes universitarias fueron salvajemente abusadas en la ciudad boliviana de Villazón, limítrofe con La Quiaca. En circunstancias que todavía se intentan establecer, las jujeñas - no trascendieron sus nombres - fueron drogadas por el dueño de una hamburguesería el 25 de septiembre último pero la noticia se conoció esta semana.

De acuerdo a la versión aportada por el diario El Tribuno de Jujuy, las chicas habían cruzado la frontera y cuando terminaron de consumir lo que habían pedido, el dueño del local Rubén Saavedra - prófugo de la Justicia desde que se conocieron los hechos - les ofreció un plato que les provocó mareos.

Lo que vino después fue el horror. Las cuatro aparecieron, en distintas situaciones, en la vía pública. Tres de ellas con lesiones leves y una, de 19 años, con signos de haber sido ultrajada con un elemento punzo cortante.

De acuerdo al juez de Instrucción en lo Penal N° 2 de la provincia, Javier Francisco Arostegui, hay dos denuncias en curso, radicadas por los familiares. "Nosotros estamos colaborando únicamente con las historias clínicas", aclaró a Perfil.com el magistrado que no tiene competencia en la investigación pero recibió las presentaciones: "Hicieron una denuncia en la Brigada de Investigaciones de Jujuy y después hicieron una denuncia en la Seccional 17 de La Quiaca".

Según el magistrado, la información que circula forma parte de "trascendidos de prensa y las autoridades bolivianas y policiales no han tenido contacto con este juez y la fiscal que ha estado tratando este tema. No tenemos forma de confirmar cómo ocurrieron las cosas: está en secreto de sumario", indicó Arostegui. "Este juzgado está actuando con un título de colaboración, una vez que completamos eso la fiscal declina competencia y nosotros vía diplomática remitimos a Bolivia y a los organismo competentes que están actuando, es un hecho grave".

La cónsul argentina en Villlazón, Reina Illya Josefina Sotillo, que participó de una movilización en reclamo de Justicia este miércoles, relató impactada a este portal que la chica que aún permanece internada "depende, en su sobrevida, de diversas circunstancias artificiales" ya que como consecuencia del ataque "se lesionó gravísimamente el aparato intestinal, reproductor y urinario".

A su vez, la funcionaria de Cancillería indicó que "el consulado argentino no sólo los acompaña (estamos tres veces por día está con la joven) sino que inmediatamente se trasladó a Jujuy para ayudar en lo que fuera". Sotillo opinó que "lo importante es que evoluciona bien en el marco de dolencias que todavía tiene, hay infecciones, hay una situación de debilidad importante".

Uno de los primeros en ponerse al frente del reclamo para el esclarecimiento del caso, fue el sacerdote Jesús Olmedo, que en diálogo con Perfil.com contó  que se movilizaron para protestar por estos hechos  "fuimos al restauraunt  y hoy pusieron 'clausurado' en la puerta". Olmedo precisó que un hermano del sospechoso, al que los medios locales bautizaron como "el monstruo de VIllazón", se ofreció en la búsqueda: "Fuimos a la policía y nos dijeron que estamos interrumpiendo la investigación con la marcha. Nos fuimos a la fiscal a cargo de la causa y ellos salen con el mismo rollo: que (Rubén Saavedra, el dueño del restaurante) no fue encontrado. El se presentó hace varios días pero se fugó, iba a firmar para testificar que estaba colaborando con la policía pero ya no está. Si hasta fin de semana no hay voluntad de la policía, se quería hacer una marcha grande en Bolivia y en La Quiaca: aquí también quieren ocultar la cosa", sostuvo el cura.