Los cinco rugbiers que murieron calcinados el sábado en un accidente en Misiones fueron velados esta tarde en la municipalidad de San Miguel y luego los cadáveres fueron trasladados a la Morgue Judicial de Ciudadela para cumplir con los penosos trámites de identificación por ADN.
El velatorio, que se realizó desde las 14 en el salón Dorado de la Intendencia, fue autorizado por la justicia para que las familias y amigos de los jóvenes puedan despedirse de ellos en una ceremonia conjunta, tras lo cual los cuerpos serán sometidos a pericias de ADN, informó a DyN el capitán general de rugby del Club San Miguel, Marcos Jurán. El capitán deportivo dijo que según la autorización que dio la justicia "el velatorio se realizaea "de 14 a 18.30" y después los cuerpos serían trasladados a la morgue, en Ciudadela". Jurán dijo que se realizarán las identificaciones de los cuerpos mediante ADN para que cada familia pueda disponer de las inhumaciones.
"Los chicos iban a Cataratas para participar de un torneo, pero por amigos que tenían en esa zona que también jugaban al rugby", aclaró el rugbier. Jurán sostuvo que eran nueve en total los jóvenes que viajaron el sábado a Misiones, dado que otros cuatro deportistas se desplazaban en otro automóvil.
"Todo esto es muy doloroso, era gente muy importante para el club y para la zona, nuestro club es muy chico y ellos, además de buenos jugadores, eran muy queridos", lamentó en diálogo con DYN.
Los cuerpos del capitán Máximo Taborda, de 37 años, los mellizos Juan Pablo y Juan Manuel Ligorria, de 22, Gastón Arias Neschenfeller, de 27, y Mariano Falcón, de 25, llegaron ayer por la mañana a Buenos Aires trasladados desde Misiones, donde la justicia autorizó también el viaje a sus domicilios de origen. El accidente ocurrió el sábado por la mañana cuando el automóvil, que al parecer circulaba a gran velocidad, despistó en la ruta nacional 12 y tras chocar contra un paredón se incendió y provocó la muerte de sus cinco ocupantes.
Fuente: DyN
