El Splendour of the Seas, de la empresa Royal Caribbean, amarró el lunes pasado en el puerto de la Ciudad de Buenos Aires. Llegó proveniente de Punta del Este, en Uruguay. Su próximo destino era Brasil. Y el final, Europa. Con once pisos, una capacidad superior a los 2 mil pasajeros, un teatro y hasta un campo de minigolf de 18 hoyos, este crucero de 250 metros de eslora figura entre los más lujosos de su especie. Pero ni el glamour del lugar ni la inmensidad impidieron que los perros antinarcóticos recorrieran los pasillos de los 900 camarotes hasta encontrar más de 15 kilos de cocaína de máxima pureza que dos mozos extranjeros intentaban llevar a la costa europea.
El operativo fue realizado por la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP), a través de la Dirección General de Aduanas.
Según las fuentes, el procedimiento se dividió en dos partes: en una primera instancia, se descubrió que dos mozos de la embarcación llevaban adheridos con cinta a sus cuerpos “cuatro ladrillos perfectamente prensados”. Ambos fueron detenidos. Luego, con la intervención de los canes, se hallaron otros diez paquetes con droga escondidos en una mochila y en el resto del barco.
“Los catorce ladrillos fueron sometidos a los controles de narcotest, que confirmaron que se trataba de cocaína de máxima pureza, y se dio intervención al Juzgado Penal Económico N° 1, a cargo del Ezequiel Berón de Astrada, quien ordenó el secuestro de la droga y la detención de los tripulantes”, precisaron desde la AFIP.
De lujo. El crucero Splendour of the Seas había arribado a Buenos Aires el lunes desde Punta del Este. Tenía previsto partir hacia Brasil y luego llegar a Europa.
Los voceros detallaron que “se trata de una lujosa embarcación que cuenta con 11 pisos y 250 metros de eslora. Está operada por la empresa Royal Caribbean y tiene una capacidad máxima de 2.074 pasajeros”.
Además, posee 900 camarotes, cuatro restaurantes, un spa y gimnasio. Tiene dos piscinas y cuatro jacuzzis, así como también una pista para correr en la cubierta superior, un campo de minigolf de 18 hoyos y un teatro a bordo.
Fondeo. Luego de la detención de los dos tripulantes, la revisión de su camarote y el secuestro de la droga que intentaron subir al crucero, personal aduanero realizó una búsqueda exhaustiva (fondeo), con ocho canes antinarcóticos y veinte inspectores, en distintos lugares del barco.
Los voceros explicaron que “este fondeo dio un resultado positivo cuando, en un pasillo sin salida, se encontró una mochila que en su interior tenía otros diez ladrillos de cocaína con distintos tipos de envoltorios, algunos con el mismo patrón de los encontrados anteriormente adheridos a los cuerpos de los tripulantes detenidos”.
Según las fuentes consultadas, la droga secuestrada en el crucero fue trasladada al edificio de la Estación Marítima Buenos Aires (EMBA) de la Aduana de la Ciudad, donde se realizó la instrucción del caso y se pesaron todos los paquetes de cocaína, que arrojaron un peso total de 15,3 kilogramos.
En tanto, los mozos –uno de origen chileno con pasaporte australiano y el otro de nacionalidad croata– quedaron detenidos, a disposición del juez Berón de Astrada, ante quien deberán rendir cuentas.