Un chico de 13 años que sufría constante acoso escolar, permanece internado en grave estado en el hospital Virgen del Carmen de Zárate, luego de dispararse en la cabeza.
Al menor lo cargaban por su color de piel y lo llamaban "Obama". Cansado de la situación, el adolescente pidió ser cambiado de institución y logró una aparente tranquilidad. Sin embargo, tomó la drástica decisión de pegarse un tiro.
Los hechos. El lunes, el nene faltó al colegio sin el consentimiento de sus padres. Cuando su madre se enteró, lo retó y luego acudió al colegio para hablar con las autoridades. Cuando regresó se encontró con la terrible escena: su hijo yacía en el piso de su habitación con un disparo en la cabeza.
"Mi mamá no le pegó. Nunca nos pegó. Sólo discutieron, lo retó por haberse rateado como cualquier mamá, pero no hubo violencia", relató el hermano de la víctima al canal C5N. Allí también recordó que los compañeros de su anterior escuela "lo maltrataban y le decían 'Obama' porque "es morochito".
"Últimamente estaba muy tirado, por eso decidimos cambiarlo. Creo que lo que pasó tiene más que ver con eso que por el reto de mi mamá", sostuvo.
Consultado sobre de dónde salió el revólver , el familiar explicó: "El arma es de mi papá. La tenemos por los hechos de inseguridad que hay en la zona, está todo muy peligroso. Pero nunca la mostró ni dijo dónde la guardaba, no sé cómo hizo para encontrarla".
