La Justicia dictó hoy la "falta de mérito" y dejó en libertad a Pablo Carpintero, supuesto "hacker" y ex agente de seguridad sospechado de haber espiado mails de políticos, periodistas y famosos.
Carpintero estaba preso desde hace diez días cuando volvió de Uruguay, luego de permanecer en ese país durante más de ocho meses, sin atender al pedido de captura de la justicia argentina.
Hoy, la jueza federal de San Isidro, Sandra Arroyo Salgado, entendió que no había elementos para procesarlo por el delito de violación de secreto, que castiga con penas de hasta seis años de cárcel a quien "revelare secretos políticos o militares concernientes a la seguridad, a los medios de defensa o a las relaciones exteriores de la Nación".
Si bien la jueza le dictó la falta de mérito, el ex agente de la Policía de Seguridad Aeroportuaria será investigado por la magistrada y no podrá ausentarse sin avisar al juzgado, indicaron fuentes judiciales.
"En este momento, Carpintero recupera la libertad, pero no podemos dar más detalles por disposición de la ley de inteligencia", se limitó a decir el abogado Alejandro Soñis, defensor de Carpintero, al confirmar la salida de la cárcel de Marcos Paz de su cliente.
La Justicia investiga a una red de espías cibernéticos que durante más de un año y medio se "metieron" en computadoras y escuchas de importantes personajes, para traficar comercialmente la información que obtenían y hacer operaciones políticas.
Entre las víctimas de esas violaciones de secreto figuran la presidenta Cristina Kirchner, ministros del Gabinete, jueces encabezados por el titular de la Corte Suprema, Ricardo Lorenzetti, y ricos y famosos como Susana Giménez y Gerardo Sofovich.
Iván Velázquez y Pablo Carpintero fueron señalados como la mano operativa de esos supuestos "hackeos". Pero en abril de 2008 desaparecieron del país rumbo a Uruguay diciendo ser víctimas de una interna de la Secretaria de Inteligencia de Estado (SIDE). Según su versión, actuaron así por órdenes cruzadas de directivos de la central de espías.
Velázquez, quien continúa en Uruguay, había sido detenido allí por un caso de coimas, fue excarcelado y cayó nuevamente preso hace unas semanas en el país vecino.
A principios de febrero, en tanto, en un barco de Buquebús, Carpintero volvió a la Argentina y se presentó a la Justicia. Si bien, pensaba quedar libre inmediatamente, la jueza Arroyo Salgado rechazó el pedido, ordenó su indagatoria y le rechazó la excarcelación frente a sus antecedentes de una posible evasión.
Carpintero se negó entonces a declarar , mientras que el abogado Soñis explicó que su cliente había estado alejado del país porque su cliente no había estado prófugo sino refugiado en Uruguay dado que aquí no tenía las garantías suficientes.
Fuente: DyN.