El sur de la capital de Uruguay, sus zonas más antiguas, se vuelven una fiesta especialmente en épocas de carnaval, con tres grandes atractivos para el turista y el lugareño. Esos tres circuitos imperdibles son las murgas, el Desfile de Llamadas y la movida en la zona del puerto.
Las murgas
La particular conformación de música y canto que es la murga uruguaya moldea parte de la identidad nacional y funciona a lo largo del año. Pero su espíritu, sus temas, su mayor vibración suceden en carnaval. Entre sus influencias negras y criollas, reaparece con claridad el mestizaje con íconos del carnaval europeo –regido por el dios Dioniso devenido Rey Momo– y con la estética y los personajes del Carnaval de Venecia y de la Commedia dell’Arte –un séquito conformado por Pierrot, Colombina y otras melancólicas apariciones–. Esta atractiva multiculturalidad renace cada verano, a lo largo de la avenida 18 de Julio, sobre todo, entre Plaza Independencia y Plaza Cagancha. Por allí desfilan corsos, carros alegóricos, bellezas femeninas y cabezudos durante casi cuarenta días: el Desfile Inaugural Carnaval 2012 será el jueves 26 de enero.
En este contexto, por su parte, las murgas se presentan sobre los tablados, para contar cantando de qué va la cosa. Porque, si en algo se parecieran la murga uruguaya y la porteña, es en la capacidad de retratar el sentir popular en versos sencillos y pegadizos de picante contenido socio-político, y un abanico variopinto de amor, fútbol e ilusiones.