Inhumaron en Gesell al chico asesinado en el aula

Los restos de Jonatan Otero, el estudiante de 18 años asesinado de tres puñaladas por un compañero de clases en la localidad bonaerense de Villa Gesell, fueron inhumados hoy en el cementerio local. Familiares y amigos de la víctima asistieron esta mañana con una profunda conmoción al cementerio para despedir a Otero, quien falleció al recibir el jueves pasado a la noche tres puntazos, luego de discutir con otro joven en el colegio 1 de educación Media de Villa Gesell.

El intendente de la ciudad balnearia, Jorge Rodríguez Erneta, manifestó su dolor a la familia del joven asesinado y aseguró que desde su lugar hará todo lo necesario para que se haga justicia. Por su parte, compañeros y amigos de Otero anunciaron que el próximo lunes realizarán una marcha por la ciudad de Villa Gesell en reclamo de justicia por el homicidio. El agresor de Otero, un adolescente de 17 años, continuaba detenido hoy a disposición de la Justicia de Menores en una institución situada en la ciudad de Mar del Plata.

En tanto, Gabriel Otero, tío del estudiante asesinado, sostuvo hoy que "el profesor no hizo nada para parar" la agresión que culminó con la muerte de su sobrino. "Fue una discusión tonta que terminó trágicamente, todo por un inadaptado y criminal, porque un chico que va con un cuchillo a la escuela no es una persona normal", indicó el hombre.

Ante la información que el profesor de matemáticas Daniel Roviglio intentó persuadir a los jóvenes para que culminara la pelea, Otero señaló que "el profesor no hizo nada para eso". En declaraciones a radio 10, el tío de Jonatan Otero relató que "la discusión comenzó por una provocación de este personaje hacia mi sobrino". "Mi sobrino tenía un buzo con capucha, (el agresor) lo agarró de atrás y automáticamente le tira los puntazos, y uno le perfora en el corazón", añadió.

Otero señaló que todavía "no tiene explicaciones claras para dar", ya que su sobrino "no era una persona agresiva".
Según testigos del hecho, los estudiantes comenzaron a discutir en medio del dictado de clases del profesor de matemáticas.
Uno de los estudiantes arrojó al otro el papel en el que efectuaba la tarea, tras lo cual empezaron a discutir fuertemente.
El crimen de Otero conmocionó a Villa Gesell, una ciudad de 40 mil habitantes, que en la época de verano recibe a miles de turistas para disfrutar de sus playas.

Fuente: DYN