El cuñado de Mauricio Macri, a quien la Justicia indicó como uno de los hombres a quien 'Fino' Palacios y Ciro James le pincharon el teléfono, fue internado el pasado viernes en la Clínica Psiquiátrica del Parque Leloir, en Moreno, por un supuesto estado de intoxicación, según informó el portal bonaerense 24CON.
Autoridades del psiquiátrico donde fue internado Diego Maradona en mayo de 2004 confirmaron a Perfil.com que Daniel Leonardo, de 50 años, se encuentra bajo un tratamiento personalizado por presuntas alteraciones psiquiátricas que le provocó un violento tiroteo ocurrido frente a su domicilio de Ituzaingó en noviembre de 2009. Eso ocurrió pocos días después que trascendieran las escuchas ilegales de las que fue víctima.
De acuerdo al portal de noticias, Leonardo tomó el viernes su medicación de rutina y la mezcló con alcohol. Resultado: un grave cuadro de intoxicación y desórdenes psicológicos. Su familia entonces lo llevó a la clínica privada del exclusivo Parque Leloir.
El abogado de Leonardo, Luis Conde, aseguró esta mañana en Radio Mitre que su defendido padeció una crisis nerviosa. “Su mente explotó, no aguantó la presión. Sufrió cuatro llamados con amenazas de muerte en los últimos tiempos y también un coche se le paró al lado en la autopista. Le señalaron que le iban a disparar", precisó el letrado.
De acuerdo al portal Noticias Urbanas, Conde agregó que por esos hechos Leonardo consultó con un psiquiatra y se le recetó una medicación. “La tomó como pudo y a eso le agregó alcohol en su desesperación. Empezó a perder la conciencia de sus actos. Quería evadirse de la realidad", consideró el abogado.
Al límite. Al parecer, también hubo otra una serie de acontecimientos en las últimas semanas que preocuparon más de la cuenta al yerno de Franco Macri. El incidente a balazos está próximo de llegar a juicio oral, pero el sospechoso detenido fue imputado por "robo y lesiones", y no por "atentado".
A su vez, el cuñado de Macri está citado por la comisión investigadora de la Legislatura para que ratifique si fue su suegro Franco, con el supuesto aval de Mauricio, los que habrían encargado las pinchaduras contra sus teléfonos y un seguimiento a su persona a la "pyme" del espionaje manejada por Palacios y James. Todo eso sin contar que el juez Norberto Oyarbide, tarde o temprano, lo volverá a convocar para ampiar su declaración en la causa central de la Justicia Federal.
Leonardo, de profesión parapsicólogo, está casado con Sandra Macri, ni más ni menos que la segunda heredera de la fortuna de Franco. El padre del clan nunca tuvo una buena relación con él y hasta trascendió que hasta la boda, en 2005, Franco no lo dejaba sentarse en la mesa durante las comidas familiares.
Según explicó el mismo Leonardo en una entrevista con Mauro Viale en Canal 23, Franco no lo aceptaba porque provenía de un estrato social más bajo y porque su oficio de sanador no le satisfacía.
