La Fiscalía de la Ciudad ordenó este viernes a la Policía de la Ciudad de Buenos Aires desalojar a casi 500 manteros apostados en el barrio de Liniers, luego de diversos operativos realizados por el ministerio de Ambiente y Espacio Público para terminar con la venta callejera ilegal.
Funcionarios porteños levantaron y destruyeron con amoladoras los puestos de chapa instalados sobre las veredas, aparentemente de manera irregular o con la habilitación vencida. El operativo fue ordenado por el Fiscal General Adjunto, a cargo de la Fiscalía General, Luis Cevasco. Además, la fiscal Celsa Ramírez, a cargo de la Fiscalía Penal, Contravencional y de Faltas N°21, ordenó que se clausuran más de un centenar de puestos que conformaban verdaderas "saladitas" en el perímetro y los alrededores de la estación Liniers, del Ferrocarril Sarmiento, , según informó la agencia Noticias Argentinas.
Los puesteros se manifestaron con carteles que rezaban: "Somos familias, no somos una mafia, estamos trabajando", dado que este viernes se clausuraron 7 talleres clandestinos y se incautaron más de 800 bultos de mercadería, que contenían indumentaria, artículos de marroquinería, celulares de dudosa procedencia y accesorios. A su vez, también se secuestraron más de 200 bultos de alimentos en mal estado, que fueron destruidos por la Dirección General de Higiene y Seguridad Alimentaria del Gobierno de la Ciudad.
La Justicia tiene relevado 475 puestos, 239 de ellos comida y 236 de diversos rubros. Entre las comunidades predominantes se cuentan la senegalesa (44%), la boliviana (39%), la peruana (9%), la argentino (5%) y la paraguaya (1%), y; rubros con mayor puestos de venta son bijouterie (47%), frutas y verduras (38%), comida elaborada (13%) e indumentaria (2%).
La investigación se inició hace un tiempo luego de las denuncias de vecinos y comerciantes de la zona, quienes realizaron reclamos para recuperar espacios públicos. Entre las presentaciones que se hicieron se argumentó: bloqueo de veredas, corte de paso a los peatones, competencia desleal a comercios y venta de productos ilegales.
El desalojo tiene lugar un año después de un operativo similar para remover a los vendedores callejeros de Once, en el barrio porteño de Balvanera, en una jornada que terminó con represión y detenidos. Los manteros, no obstante, lograron un acuerdo con el Gobierno de la Ciudad para comercializar sus productos en un predio ad hoc. El Gobierno porteño informó que la Fiscalía de la Ciudad y la Policía de la Ciudad realizaban un "operativo de dimensiones sin precedente" en el barrio de Liniers, con el objetivo de desalojar de la vía pública
El de Liniers es de uno de los últimos grandes focos o de venta ilegal de la capital, ubicado en el perímetro de la avenida Rivadavia, Carhúe, Ventura Bosch y colectora de la avenida General Paz, en las inmediaciones de la estación de tren de Liniers. Instalados a lo largo de 38 cuadras, lo que equivale a unos 3300 metros lineales de puestos, funciona una feria gastronómica de la colectividad boliviana y operan puestos ambulantes de diferentes rubros, según consignó la agencia Télam.
El año pasado la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME) concluyó que Liniers tenía el 25% de participación en la distribución de puestos de venta ilegal, pasando de los 679 puestos de 2011 a los 900, informó el diario La Nación.