Luego de una denuncia presentada en el ámbito de la Ciudad de Buenos Aires por ejercicio ilegal de la Medicina, efectivos de la Policía de la Ciudad detuvieron en Corrientes a una mujer que se hacía pasar por una doctora matriculada. Para sorpresa de los agentes de seguridad porteños, la mujer no solo ejercía la medicina de manera ilegal en la provincia mesopotámica, sino que lo hacía en una clínica que no estaba habilitada en la que además adulteraba las firmas y recetas de una doctora matrículada.
En el operativo llevado a cabo días atrás en la ciudad de Curuzú Cuatiá, se detuvo además al director de la clínica, a dos operarios y a la madre de la falsa médica por agredir al personal policial en el momento de la detención.
La investigación de los efectivos de la División Defraudaciones y Estafas de la Policía de la Ciudad comenzó en la localidad bonaerense de Virrey del Pino, partido de La Matanza, por medio de la denuncia de una doctora, que se había dado cuenta que alguien estaba recetando medicación a menores de edad con su nombre y número de matrícula.
En una primera instancia, las autoridades se desplazaron al domicilio de la estafadora en Virrey del Pino, donde realizaron un allanamiento que dio como resultado la obtención de múltiples pruebas contra la mujer, aunque ésta ya se había dado a la fuga.
Luego de realizar varias tareas investigativas, se localizó a la falsa médica en la localidad correntina de Curuzú Cuatiá, donde estaba trabajando en una clínica que no contaba con habilitación, como así tampoco las tres ambulancias que pertenecían a la institución. Por tal motivo, los efectivos porteños se apostaron en la puerta del centro de salud donde minutos después la criminal llegó a bordo de una ambulancia.
Tras detenerla, se llevaron a cabo dos allanamientos: uno en la clínica y otro en la casa particular de la mujer que quedaba a escasos metros. En ese momento, y mientras se llevaba a cabo el procedimiento, apareció la madre de la involucrada que se resistía a que la policía llevara a cabo su trabajo y tomó una botella de alcohol con la que roció a los efectivos y amenazó con prenderlos fuego. Afortunadamente y utilizando la mínima fuerza pudieron contenerla.
El Magistrado interventor solicitó, en un primer momento, la detención de la mujer por amenazas, atentado y resistencia a la autoridad.
Cabe destacar que también fueron demorados el director, subdirector y la jefa administrativa de la clínica, a los que se les imputan los delitos de Asociación Ilícita, Ejercicio Ilegal de la Medicina y Atentado contra la Salud Pública.
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Por otra parte, la clínica fue clausurada por falta de habilitación y dentro del lugar permanecieron también las tres ambulancias y toda la documentación probatoria del delito que se llevaba a cabo en el lugar. Se contabilizaron más de 500 constancias de atenciones médicas de parte de la falta médica. La institución quedó con consigna policial hasta que las pruebas sean trasladadas a los depósitos judiciales.
Además, se rastrearon siete órdenes de prestación en farmacias de la zona, a las que se les solicitó que envíen las recetas al Juzgado porque representan elementos probatorios esenciales del delito que cometió la falsa médica.
También se secuestraron un DNI a nombre de la verdadera profesional, al igual que una credencial de médico, ambas con fotos de la detenida, un sello con el nombre de la médica que usurpó la identidad y el número de matrícula, una receta a nombre de la imputada por drogas psiquiátricas con sello y firma apócrifas y dos tarjetas de débito.
El Juzgado Federal Criminal y Correccional de Lomas de Zamora Número 2, a cargo del doctor Luis Antonio Armella y ante la Secretaría Número 5 del doctor Maximilano Callizo, avaló lo actuado por el personal policial y ordenó el traslado de la imputada a la comisaría local para luego ser llevada a la Ciudad de Buenos Aires para continuar con el proceso judicial.
En el lugar se labraron actuaciones por "Usurpación de título, falsificación de documentos públicos y ejercicio ilegal de la medicina".
