Dos semanas después de la muerte de su hermana Inés Zorreguieta, la reina de Holanda, Máxima Zorreguieta, retomó su agenda pública al visitar la UMCG Proton Therapy Center, el primer centro en los Países Bajos en ofrecer terapia de protones.
Queen Máxima spoke about the loss of her beloved, gifted little sister Inés Zorreguieta.
— Rick Evers (@RickEversRoyal) June 19, 2018
(with English subtitles) pic.twitter.com/OjLw6K5Jc6
En un video difundido por las redes sociales, Máxima habló por primera vez sobre la muerte de su hermana: "Mi pequeña, dulce y talentosa hermana Inés también estaba enferma. Era incapaz de encontrar la alegría y desafortunadamente no pudo curarse. Nuestro único consuelo es pensar que por fin encontró la paz".
La monarca holandesa aprovechó la ocasión para agradecer el apoyo recibido: "Quiero aprovechar la ocasión para agradecer las innumerables cartas de pésame recibidas estos días. Han sido de mucha ayuda. También quiero dar las gracias a los medios de comunicación por respetar el dolor de nuestra familia".
Inés Zorreguieta, la hermana de Máxima, fue encontrada muerta en su departamento de calle Río de Janeiro al 200, en el barrio porteño de Almagro, según fuentes judiciales se habría tratado de un suicidio.
IEn febrero de 2016, Inés había sido nombrada en la Dirección General de Administración de la Secretaría Ejecutiva del Consejo Nacional de Coordinación de Políticas Sociales de Presidencia de la Nación. Designación que generó polémica por no poseer los requisitos básicos de antigüedad del cargo.
En 2012, la revista Noticias informó que sufría una obsesión por el peso. Aquel año, producto de un cuadro vinculado a anorexia y depresión, fue internada en una clínica de la Ciudad de Buenos Aires. Meses más tarde, la joven comenzó un proceso ambulatorio que la mantuvo internada de lunes a viernes mientras que los fines de semana volvía a casa de sus padres.
