No es la primera vez que el grupo de familiares eligen este espacio para realizar el acto que conmemora una de las mayores tragedias ferroviarias del país, que dejó el saldo de 51 personas muertas y más de 700 heridos. Es la plaza Cumelén de Castelar norte, a metros de la estación, frente a los talleres ferroviarios. Lo diferente en esta ocasión es que se le sumó el pedido de justicia de otro accidente, ocurrido diez días atrás a pocos metros de allí, que se cobró la vida de tres pasajeros y 315 heridos.
El sonido del avance de un tren celeste de dos pisos se entremezcló con las palabras de María Luján Rey, mamá de Lucas Menghini, víctima 51 de la tragedia de Once. “Cada 22 exigimos lo mismo. Pedimos protección para los usuarios y condiciones dignas para los trabajadores”, dijo como una de las oradoras del acto que se realizó ayer en conmemoración a los 16 meses del accidente de Once.
Las actividades comenzaron cerca del mediodía y participaron unas 300 personas. Si bien la mayoría eran familiares de víctimas y heridos de Once, también hubo familiares del hecho del 13 de junio, cuando un tren embistió a otro detenido.
“Estamos acá a 16 meses de una tragedia, pero a diez días de otra totalmente previsible”, expresó a PERFIL Paolo Menghini, padre de Lucas, y agregó: “No murieron porque los frenos fallaron o por el operario. La estructura de los trenes colapsa porque está totalmente carcomida por el óxido; si no, no se hubiera montado un vagón contra el otro y la gente no hubiera vuelto a morir entre hierros”.
Además criticó que hayan sido arreglados en los talleres de Cirigliano. Exigen que se avance con su causa y con el llamado a juicio oral. Asimismo se le pidió a la presidenta otra reacción de su parte. “A la ciudadanía, las muertes tan absurdas les generan toda la indignación posible y no un poco”, manifestó Luján. Hubo críticas también contra dichos de Luis D´Elia, el rol de la oposición y a declaraciones de Florencio Randazzo sobre que no se puede exigir que se haga en un año lo que no se hizo en cincuenta: “Recuerde que hace diez años que forma parte de un proyecto que está en el poder”, dijo la madre de la víctima 51.
También participó del acto, Eva Munguía mamá de Luca, el nene de 4 años, accidentado en Castelar, aún internado en el Hospital Posadas y quien todavía continúa luchando para que no le amputen uno de sus pies. Al resto, “los esperamos con los brazos abiertos”, dijo Paolo a PERFIL.
Castelar: imputan a dos técnicos responsables de los frenos
El fiscal de Morón Sebastián Basso, a cargo de la investigación por el choque de trenes en Castelar, confirmó ayer que llamó como imputados a los dos técnicos responsables del control del funcionamieto de la formación Chapa 1, luego de que el maquinista declarara que “en los momentos finales no le respondieron los frenos”.
Se trata de dos ingenieros, uno es empleado de la Unidad de Gestión Operativa Mitre Sarmiento (UGOMS) y el otro, un ingeniero electromecánico, que es el que firmó el certificado de habilitación para que circulara la formación. Así, a diez días de la tragedia, son cuatro los imputados en la causa: los dos maquinistas, que ya fueron indagados, y los dos técnicos.
“La idea del juzgado y fiscalía es avanzar con prudencia”, dijo Basso ayer en declaraciones a radio América, y no descartó que el choque hubiera sido provocado por una mezcla entre falla humana y técnica. Además, confirmó que aún no se realizaron los peritajes correspondientes, para saber si los frenos fallaron o no. El objetivo, dijo, es “recopilar toda la prueba suficiente para que después cuando se vaya a hacer los peritajes, nadie ponga en duda la objetividad de esa pericias”.
En ese sentido, subrayó la importancia de que “los técnicos que tuvieron participación que vengan a ofrecer las pruebas que consideren de interés”. Y agregó: “En base a esto, se dictaminará sí la formación estaba en condiciones de circular al momento del accidente”.
