A 15 años del crimen de José Luis Cabezas, los familiares y amigos del fotógrafo lo recordaron con varios homenajes y abogaron para que la Corte Suprema de Justicia devuelva a prisión a alguno de los condenados por el homicidio.
"El caso lo tiene que resolver la Corte Suprema de la Nación. Creemos que el fallo final va a ser en favor de que los asesinos vuelvan a prisión", dijo el periodista Gabriel Michi, compañero del fotógrafo en la cobertura que hacía la revista Noticias en Pinamar en enero de 1997, cuando Cabezas fue asesinado.
El aniversario número 15 por el brutal secuestro y asesinato del fotógrafo encontró a los familiares y amigos de la víctima con una nueva sensación de impunidad: ninguno de los culpables está en la cárcel.
Solo hay dos "horneros" (del grupo de sujetos condenados que provenían del barrio platense Los Hornos) que volvieron a prisión por no cumplir con normas administrativas una vez que les dieron la excarcelación, mientras el resto fue liberado por haber cumplido parte de sus condenas o recibió el beneficio del arresto domiciliario por motivos de salud.
"Mantenemos el reclamo de Justicia diciendo que esta pelea no la vamos a dejar. Este año tiene la particularidad de que no quedaron asesinos tras las rejas porque los únicos detenidos gozan de salidas y tienen libertad condicional", adelantó Michi en declaraciones radiales.
Mientras, Gladys Cabezas, la hermana del reportero gráfico, advirtió que la Justicia "goza de una impunidad tremenda" y aseguró que le gustaría saber "quién está detrás de todo esto".
"Es la Justicia que tenemos, que goza de una impunidad tremenda. Ojalá yo supiera quién está detrás de todo esto", manifestó la mujer.
Los homenajes comenzaron en la Plaza de los Dos Congresos, y desde allí los familiares y amigos partieron rumbo a la costa atlántica para realizar el acto central en la ciudad balnearia de Mar de Ajó, con un festival de música y cultura en la playa, con los hijos del fotógrafo: Agustina, de 21 años; Juan, de 20, y Candela, que hoy tiene 15 años.