Padres denunciados por abuso sexual negaron todo

El matrimonio acusado de abusar sexualmente de dos compañeras del jardín de infantes de su hija, de 4 años, expresó ante las cámaras de televisión que están a total disposición de la Justicia porque quieren que "se llegue a la verdad".

La pareja, integrada por Lucas Montero y Carolina Porto, manifestó inclusive que están dispuestos a permitir que se le realicen exámenes clínicos y psicológicos a su pequeña hija.

"Mi hija sería la primera en sufrir las consecuencias", dijo entre sollozos Porto, al salir al cruce de las acusaciones. "Si hay una red de pedofilia, y todo lo que dicen, me imagino que mi casa sería el primer lugar donde se notaría", agregó.

El esposo acotó que " por eso nos ponemos a total disposición del personal que designe el juez o el fiscal, para que (la nena) sea sometida a cualquier tipo de análisis, con el dolor que implica someter a mi hija a análisis de este tipo y a charlas de este tipo".

"Estamos totalmente dispuestos a que así sea. Más que nadie queremos que se llegue a la verdad. Más que nadie, estamos consternados por esto. Estamos apenados por esta situación y queremos que se solucione", sostuvo Porto.

La pareja se mostró por televisión, tras las denuncias que formalizaron dos familias ante la Unidad Fiscal de Instrucción (UFI) 3, que derivó en un allanamiento en la casa donde viven, en un country del partido bonaerense de Tigre.

Las presuntas víctimas son compañeras de la hija del matrimonio, que concurren al jardín Blooming Kindergarden, del partido de San Isidro.

Ayer, padres de alumnos del jardín se concentraron frente al country Islas del Sol en Tigre -adonde vive el matrimonio junto con su hija- y realizaron un escrache. Sostuvieron que los casos de niñas abusadas serían cuatro.

Durante la entrevista televisiva, Montero aseguró que jamás, por su horario laboral, está en su casa "cuando están las chicas, cuando se disfrazan, cuando se cambian o cuando juegan".

Su mujer concluyó: "Lo que más me duele de toda esta infamia es que el daño que se hizo ya está hecho. Mi hija me pide ir al colegio y no puede ir al colegio. No tengo dudas de que se va a resolver y se va a comprobar nuestra inocencia, porque no tenemos nada que ocultar".

Fuente: Télam