Los fiscales intervinientes en el juicio por el crimen de Fernando Báez Sosa desestimaron las declaraciones de Lucas Pertossi y Blas Cinalli, los acusados que rompieron el silencio y afirmaron "nunca" haber tenido intenciones de matar al joven a la salida del boliche Le Brique en Villa Gesell. Además, anticiparon que la semana próxima detallarán "el rol" de cada uno de los acusados, contra quienes reúnen pruebas suficientes.
En una de las audiencias más importantes previo a la sentencia prevista para febrero, los fiscales Juan Manuel Dávila y Gustavo García aseguraron que las explicaciones del hecho provistas por los dos rugbiers "no logran refutar las pruebas en su contra", mientras que "no hay ninguna duda" de que la indagatoria sirvió para acreditar "la materialidad del hecho", por lo que podría ser beneficiosa para la querella.
En la audiencia del pasado martes, Pertossi y Cinalli prestaron declaración indagatoria y dieron detalles sobre aquel 18 de enero de 2020. En sus declaraciones, los imputados aseguraron que nunca tuvieron la intención de "matar a nadie" y que "no le pegaron" a Báez Sosa, sino que simplemente "estaban de vacaciones", entre otras explicaciones.
"La explicación no fue suficiente"
Sin embargo, para los fiscales la explicación "no fue suficiente". "Desde el primer día hasta el día de la fecha hemos obtenido las pruebas necesarias. Estimamos que se va a acreditar el anuncio que hicimos la primera jornada", aseveró este miércoles el fiscal Dávila tras finalizar la decimotercera jornada del debate a cargo del Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) 1 de Dolores.
Por otro lado, los fiscales criticaron que los testimonios de los acusados en el juicio fueran "parcializados", considerando que "no explican todo lo que pasó y todo lo que vieron". "(Declarar en el juicio) Es un derecho que tienen los imputados, cuando eligen declarar quedan sometidos a las preguntas de la contraparte, y pasa esto de que no contestan ninguna, como pasó hoy con el primero de los imputados, o contestan de forma selectiva, respecto solo a lo que hizo él", evaluaron.
En ese sentido, consideraron que los dos acusados "han expuesto algunas explicaciones un poco intentando refutar las pruebas que había" en su contra, pero señalaron que de esas declaraciones va a sacar más provecho "la parte acusadora que de la defensa".
Sobre el contenido de las declaraciones de Pertossi y Cinalli, los fiscales comentaron que "tratan de introducir el tema del alcohol, evidentemente" para justificar su comportamiento en la madrugada de la muerte de Báez Sosa. "Nosotros nos vamos a referir a esto cuando lleguen los alegatos, lo vamos a evaluar después", insistieron, al evitar dar opiniones más profundas sobre lo dicho por los imputados y las estrategias de los acusados.
En tanto, los fiscales adelantaron también que el próximo 25 de enero, durante los alegatos, se explicará detalladamente "el rol de los ocho imputados", contra quienes aseguran haber reunido las pruebas necesarias. "La causa tiene diecisiete cuerpos. Hay muchísima prueba. Lo que vamos a hacer en los alegatos, explicaremos el rol de cada una de estas personas. Vamos a meritar qué pena le corresponde a cada uno. No tengo ninguna duda de que hemos probado la materialidad del hecho junto con la calificación, que son los agravantes", detalló.
Lucas Pertossi declaró que "no tocó" a Fernando Báez Sosa
Durante su breve declaración ante el Tribunal, Pertossi rompió el pacto de silencio y dio detalles de la jornada previa al asesinato de Báez Sosa y afirmó que "nunca" tuvo la "intención de quitarle la vida a nadie". Lo hizo en la última audiencia del juicio oral, también en una fecha especial por tratarse del tercer aniversario del hecho. "En ningún momento le pegué a Fernando Báez Sosa, en ningún momento participé de un plan de asesinato, solo fui de vacaciones. Nunca tuve intención de quitarle la vida a nadie", dijo Pertossi al final de su testimonio.
Según su relato, el 17 de enero el grupo se levantó a las dos o tres de la tarde después de una "noche larga" y se dirigieron a la playa para pasar el día. En tanto, detalló que a él le tocó "llevar la heladerita" con alcohol, siendo el abuso de esta sustancia una de las justificaciones de la defensa respecto al comportamiento violento de los imputados. Por la tarde, Pertossi indicó que algunos fueron a comprar entradas para el boliche Le Brique luego del "cierre de la playa", mientras que otros regresaron a la casa que alquilaban para cocinar y prepararse para salir a la noche.
Rugbiers: uno por uno, la situación de los ocho acusados de matar a Fernando Báez Sosa
Una vez en Le Brique habló de una pelea que hubo por parte de sus amigos y a algunos de ellos lo sacaron aunque él decidió salir por su cuenta. Según detalló, él vio un tumulto y que a uno de sus amigos "le agarraron" el pie un desconocido, a lo que él se acercó y le ordenó "soltalo", y le propinó dos patadas. En ello, recordó que él se fue hacia la esquina del boliche Le Brique, donde comenzó a buscar a sus amigos. Además, "Croniquita", como dice que le dicen sus amigos, grabó parte de la secuencia.
"Llegué a la casa y pregunto qué pasó y me dicen los chicos en la casa, no quédate tranquilo, nos peleamos pero volvimos, quédate tranquilo", dijo Pertossi, quien aseguró que luego de ir a comer al local de comidas rápidas con otros del grupo, volvió a la casa y ahí los detuvo la policía. "Estoy muy mal por lo que pasó y sigo mal, estuve con tratamiento psiquiátrico y psicológico, a todos nos afectó mucho, siento mucha pena por lo que pasó. En ningún momento le pegué a Fernando Báez Sosa, no lo toque", concluyó.
Blas Cinalli afirmó que "nunca le pegó" a Fernando
Después de la corta declaración de Lucas Pertossi en el juicio, pidió la palabra el rugbier Blas Cinalli que en todo momento manifestó que "nunca" le pegó "a Fernando" Báez Sosa. "Yo en ningún momento le pegue a Fernando Báez Sosa, supongo que con quien tuve en el encuentro dentro del boliche no sé, capaz fue él. En ningún momento le pegué, veo que dicen que él tenía ADN mío en la uña del dedo meñique", expresó.
Luego del testimonio se le pidió que con un puntero señale el video en donde estaba al momento del ataque, mientras que aseguró que "no vio" a un chico con el torso desnudo, en referencia a Fernando. También le preguntó por su proximidad con la víctima: "Pude haber estado ahí pero no lo recuerdo", y también le preguntó sobre la ubicación de otros de sus amigos, también imputados, y nunca respondió ya que sólo dijo iba a hacerlo respecto a su persona y nadie más.
Según su descripción del hecho, Cinalli indicó que vio "un tumulto" en el que un amigo suyo estaba involucrado. "Me paro y veo, y a un amigo mío lo estaban agarrando de la cintura para llevarlo a la parte de atrás de un auto, lo sigo a mi amigo porque pensé que lo iban a tirar, y cuando llegué al lado de él, veo que lo agarraron del pie porque lo querían tirar, lo suelta a él y me agarra a mí", describió.
Los lazos de sangre que unen a los acusados del crimen de Fernando
"Me iba a tirar, cuando lo logró zafar le pego una patada y lo deje ahí y que seguían gritos. Del otro lado del auto escucho gritos como que también se estaban peleando, pero voy y no veo a nadie, y regreso donde estaba, ahí veo que el chico no tenía intenciones de seguir peleando y me fui", dijo, en referencia por las imágenes que se conocen en la causa no a Fernando Báez Sosa, sino a un amigo de éste. Cinalli siguió relatando que la policía llegó a la vivienda y que el mensaje que él envió a amigos suyos vía chat horas más tarde en el que les informaba "matamos a uno" fue porque vecinos del lugar decían que un chico había muerto frente a Le Brique luego de una pelea.
A diferencia de Pertossi, Cinalli optó por responder ante la pregunta de la fiscalía: "¿Por qué dice que fue una pelea si a usted sólo lo agarraron del pie?". "Porque fue una pelea, si le pegan a un amigo suyo o me agreden, es una pelea", respondió Cinalli, quien también aseguró "no recordar" de qué hablaron entre los amigos tras el asesinato de Báez Sosa.