Los médicos legistas Juan José Fenoglio y Jorge Rodolfo Velich, propuestos por la defensa de los rugbiers, declararon este miércoles ante la Justicia por el juicio que investiga el crimen de Fernando Báez Sosa. Los profesionales cuestionaron la autopsia realizada a la víctima y sostuvieron que "la lesión en el hígado fue provocada por los trabajos de reanimación".
“La lesión en el hígado puede ser por un aplastamiento provocada por la reanimación”, detalló Fenoglio sobre los trabajos de RCP (reanimación cardiopulmonar) que realizaron los médicos que asistieron al joven asesinado el 18 de enero de 2020 en Villa Gesell.
“Encontramos literatura similares a ese tipo de roturas”, agregó el especialista. “Es por aplastamiento, si hubiese sido una trompada era distinto”, dijo al señalar las imágenes de la autopsia sobre el hígado que se exhibieron en la pantalla de la sala del Tribunal Oral Criminal N°1 de Dolores.
“Acá tenemos un paciente con 60 segundos de golpes y 45 minutos de RCP. Hay lesiones que se produjeron cuando el paciente estaba en vida, son las que le provocaron la muerte, los otros 45 minutos pueden parecer vitales pero se deben investigar si son producto de la reanimación o aquellas lesiones”, explicó.
Por otro lado, aseguró que “es raro" que una persona "se muera en el lugar del hecho por un traumatismo” y deslizó que habría que investigar si no coincidió la presencia de un aneurisma (una zona débil en la pared de un vaso sanguíneo) con un traumatismo de cráneo”. Rápidamente aclaró: “No decimos que tenía, sino que debía investigar si lo tenía”, ante la pregunta de uno de los abogados querellantes Fabián Améndola.
Cruce entre el perito Fenoglio y el fiscal García
En otro tramo de su testimonio, el Dr. Fenoglio sostuvo que “la autopsia no explica por qué murió Fernando Báez Sosa”. En ese sentido, subrayó que el informe debe "determinar causa y mecanismo de muerte, y la mecánica no está descripta”. Además, consideró que las lesiones que Fernando Báez Sosa tenía en la cara “fueron leves” provocadas por “patas y trompadas” y que prueba de ello es que no hubo fracturas.
Entonces, se produjo un fuerte cruce entre el fiscal Gustavo García y el perito cuando los forenses dijeron que no contaron con imágenes de las lesiones sufridas por el joven estudiante de abogacía, que conservó el forense Diego Duarte. “Me está faltando el respeto al decirme que no soy honesto”, expresó el funcionario judicial, al decir que el médico había tomado conocimiento de las fotos y él se lo había comunicado por escrito.
“Sí. Para nosotros las fotografías que ilustran la autopsia están en la autopsia, no aparecen tres años después. Si viene un alumno con esta autopsia le pongo cero”, le replicó Fenoglio, que es docente en medicina legal.
La declaración del Dr. Jorge Velich
El otro profesional médico que brindó testimonio en la audiencia de este miércoles fue el emergentólgo Jorge Velich, que sostuvo que Báez Sosa no murió “por la reanimación cardiopulmonar” que le hicieron, pero estos trabajos sí “agravaron la situación por la movilización del cuerpo”.
Velich además afirmó que la víctima no murió en el lugar, porque si hubiera sido así la ambulancia no lo habría trasladado. “Sí estuvo inconsciente, en un estado tan crítico que deja de respirar y se realizan maniobras para reanimarlo”, relató.
“¿Un sangrado en el hígado pude causar la muerte?”, preguntó el defensor de los imputados, Hugo Tomei, al médico. “Puede causar la muerte o acelerar la muerte que ya viene”, fue su respuesta. También el letrado le preguntó el horario de la muerte que consta en la causa y Velich dijo que a las “6 de la mañana” y que no hay datos desde que la médica lo dejó a Fernando en el shock room a las 5.15 de ese día.
FP / MCP