Choferes de la línea 60 de colectivos, que cada día trasladan a más de 200 mil personas, iniciaron esta mañana un paro por tiempo indeterminado, para rechazar una agresión sufrida por tres dirigentes sindicales, según denunció Néstor Marcolín, uno de los delegados: "Paramos para que no nos maten".
En su denuncia, Marcolín aseguró que "una patota de la UTA (Unión Tranviario Automotor) que llegó en tres micros, en connivencia con la empresa Monsa, los agredió físicamente". Los trabajadores del 60 denuncian, además, deficiencias en el servicio y piden por cuatro trabajadores despedidos.
Los choferes cortaron la autopista Panamericana, en sentido a Capital, pero fueron desalojados por Gendarmería. Otro grupo bloqueaba el tránsito en el cruce de la avenida 9 de Julio y la calle Venezuela.
"Queremos que nos convoquen a negociar, aunque de la empresa ya esperamos poco. Creemos que la única solución es que intervenga el Ministerio de Trabajo para impulsar una resolución", agregó Esteban Simonetta, representante de los choferes que conducen ramales que van de Constitución a Tigre y Escobar.