La organización Un techo para mi país difundió un relevamiento sobre el crecimiento de las villas miserias en el Gran Buenos Aires: en los últimos cinco años, asegura el informe, se formaron 90 en el conurbano bonaerense y treparon a 864 los asentamientos en Capital Federal.
El trabajo, elaborado por unos 600 voluntarios de la ONG que relevaron los barrios más carenciados del Gran Buenos Aires, arrojó que desde 2001 (año del estallido social que derivó en la salida de Fernando De la Rua) hubo un crecimiento del 55 por ciento en la población de las villas.
De acuerdo a Un techo para mi país, el 65, 4 por ciento de las villas de emergencia continúa en proceso de construcción para cubrir la llegada de nuevos pobladores: "El crecimiento de los asentamientos, aún en contextos económicos favorables y pese a los distintos programas sociales, da cuenta del cáracter estructural del fenómeno", señala el sondeo.
Entre los migrantes argentinos, sobresale Chaco: el 19, 5 por ciento de los chaqueños elige el conurbano para instalarse mientras que el 16, 2 por ciento proviene de Santiago del Estero y el 15, 6 de Corrientes.
La mayor cantidad de barrios informales, por otra parte, se levantan en el partido bonaerense de La Matanza. En total, hay 156 villas y asentamientos sostienen a 120.236 familias seguido por Quilmes, con 65 asentamientos y 35.713 familias en magras condiciones.