La Armada Argentina encontró ayer un tambor de aceite que pertenecería al buque pesquero Rigel, que tuvo su última comunicación el viernes de la semana pasada y en el que continúan desaparecidos ocho de sus nueve tripulantes.
Por su parte, la Asociación Argentina de Capitanes, Pilotos y Patrones de Pesca (AACPyPP) denunció en un comunicado las malas condiciones laborales para los pesqueros en “balsas vencidas y buques vetustos”. “Cualquier cosa que flote sale corriendo a pescar porque los empresarios quieren ganar dinero”, le dice a PERFIL Jorge Frías, secretario general de la AACPyPP.
“De los 700 buques pesqueros que operan en el país, la mitad tiene más de cuarenta años”, afirma Frías sobre el mal estado en que se encuentran las embarcaciones que llegan a tener hasta setenta años, de madera, y que “no deberían tener más de treinta”. “A la antigüedad se le suman las modificaciones que les hacen para agregarles artilugios de pesca, lo que aumenta su peligrosidad”, agrega Frías y pone de ejemplo al mismo Rigel, que tiene unos brazos laterales de metal para pescar y que “dificulta la navegación en un temporal”.
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El Rigel había zarpado el martes 5 para pescar langostinos en el sur argentino. Pero el viernes de la semana pasada tuvo su última comunicación, cuando se encontraba a 220 km al sudeste de Rawson en un temporal con olas de cinco metros y vientos de 40 km/h. Esta semana se confirmó que el cuerpo que Prefectura Nacional Argentina (PNA) encontró en el agua se trataba de Salvador Taliercio, capitán del pesquero.
Según una investigación que realizó la Fundación Atlántica desde Uruguay, y que se difundió el año pasado, murieron 86 pesqueros argentinos en 41 naufragios, desde el año 2000. Este informe realizado por Silvia Paleo, docente de la Universidad Nacional de Mar del Plata, muestra que el país lidera el ranking de mayores siniestros en la industria pesquera desde 1970.
Controles. “Acá existe un facilismo entre la PNA y los empresarios en el que permiten salir a navegar con ‘pendientes’. Significa que cuando la Prefectura detecta incumplimientos, le brinda a la empresa un plazo para resolverlo mientras sale a pescar”, explica Frías.
Como antecedente, el año pasado el buque Marisco Segundo fue denunciado por las asociaciones gremiales por tener un total de 58 pendientes.
Marcha por el ARA San Juan
Al cumplirse siete meses de la desaparición del ARA San Juan, los familiares de los tripulantes se manifestaron ayer a la tarde en la puerta de la Base Naval de Mar del Plata. Volvieron a pedir que se intensifique la búsqueda y que el Ministerio de Defensa confirme en estas tareas a la empresa española Igeotest Geosciences. En la manifestación también estuvieron presentes las familias de los tripulantes de los buques pesqueros Rigel y Repunte, que se hundió el año pasado.
