Parece inevitable. Las palabras “cadena nacional” terminarán, quizá, perdiendo peso connotativo como sucedió con “carta documento” que de tanto escucharlo en boca de personajes farandulescos se transformó en algo sin demasiado sentido e importancia.
Y fue con la “cadena nacional” usada a modo de juego que comenzó la cena, propiamente dicha, por los diez años de la Fundación Ideas del Sur. El inicio de la conducción por parte de Oscar González Oro se interrumpía con el audio con la famosa frase “A partir de este momento pasa a transmitir...”.
Algunas risas, algunas, dieron paso a una palabras del conductor radial quien logró convencer al anfitrión de la noche, Marcelo Tinelli, que lo habilitara a hacer algo fuera de programa y que él disfruta mucho: oficiar de rematador para así lograr que gente que él conoce abra sus billeteras y aporte dinero adicional.
Esta vez, se remataron cuatro relojes de U$S 25 mil cada uno y Oro escogió con seguridad a sus “víctimas”; los tres fanáticos y coleccionistas de esos accesorios: Daniel Hadad, Samuel Gelblung y Jorge Rial. Así, por US$ 27 mil, US$ 26.500 y US$ 20.500, respectivamente, los tres se fueron con un Hublot edición limitada.
Pablo Codevilla, presente también fue interceptado por González Oro pero a pesar de los embates, sonrió y se abstuvo de pujar. Un cuarto reloj, lo compró Tinelli y se lo regaló a Carlos Andrés Calvo, como agradecimiento por estar ahí esa noche.
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