Tres crímenes cometidos con suma violencia conmocionan a tres ciudades del interior de la provincia de Santa Fe. Una adolescente degollada; una anciana golpeada; y un hombre arrojado vivo a un aljibe, son los episodios que mantienen en vilo a las localidades de El Trébol, Las Parejas y San Justo.
Según El Litoral.com , de los tres casos, sólo uno parece estar encaminado en cuanto a su esclarecimiento.
El primero ocurrió a principio de este mes en El Trébol, donde un hombre de 60 años apareció en el fondo de un aljibe. El segundo fue el 5 de junio. La policía de la localidad de San Justo encontró muerta, en su casa de campo a una mujer de 83 años a la que asesinaron con un golpe en la cabeza, con un hacha de mano u otra herramienta de labranza. El último de los casos sucedió en Las Parejas, donde una adolescente de 17 años fue degollada en una calle del centro.
Caso por caso. Alberto Burdisso desapareció el 1º de junio pero la Policía tardó varios días en encontrarlo. Luego de varios rastrillajes dieron con el cadáver del hombre en el fondo de un aljibe. Sobre el motivo, El Litoral cuenta que “se cree que quienes están involucrados en su muerte buscaban quedarse con su casa, que había comprada con una importante indemnización cobrada años atrás”. Por este hecho, tres hombres y una mujer continúan presos a la espera de las indagatorias.
El 5 de julio la Policía encontró muerta en el comedor de su casa a Ioris Noemí Belluni de Laurencena, presidenta de la Cooperación Policial de Comisaría Segunda de San Justo. Un móvil solía visitarla todas las tardes para llevarle novedades sobre su labor, pero un día al ver que ella no salía decidieron entrar en la casa y se encontraron con el cadáver.
Según explica El Litoral , “la autopsia reveló que se trató de un golpe intencional, con un elemento contundente que pudo ser una barra de hierro, un hacha de mano u otra herramienta de labranza, que no fue encontrada en el lugar del crimen”.
En Las Parejas, familiares, vecinos, amigos y allegados a Bárbara Simón participaron de cuatro marchas en estas dos semanas que transcurrieron desde que la encontraron tirada, en medio de un charco de sangre, en plena calle. Todavía no hay detenidos ni indicios que permitan sospechar de alguien, cuenta el portal santafesino.
Lo único que le faltaba era su teléfono celular y, si bien es posible que fuera víctima de un ataque sexual, fuentes de la investigación explicaron a El Litoral que no presentaba signos de abuso. Los investigadores encontraron el cuchillo utilizado para ultimarla.
