Un niño de siete años murió aplastado por un arco de fútbol que golpeó en su cabeza cuando jugaba con amigos en un polideportivo de la localidad santafesina de Las Rosas, unos 120 kilómetros al noroeste de la ciudad de Rosario.
El hecho, conocido hoy, es el segundo de similares características en cuatro meses, luego de uno ocurrido en diciembre pasado en la localidad entrerriana de Los Conquistadores, en el norte de la provincia, donde también falleció un niño de siete años.
El deceso en Santa Fe se produjo en la tarde del viernes en el polideportivo del Club Almafuerte, donde un grupo de nenes jugaba al fútbol.
La víctima fue identificada por la Policía como Agustín Galluchi, de 7 años, quien murió en el lugar tras el impacto del arco de metal en su cabeza.
Raúl Serra, presidente de la entidad, dijo esta tarde al canal TN que el hecho "fue un accidente trágico, lamentable por donde se lo mire, que enluta a todo el pueblo". Según relató, "cuatro o cinco chicos se colgaron del travesaño", entre ellos la víctima.
"El arco se mueve hacia adelante, Agustín estaba colgado, se asusta, se larga, quiere correr hacia adelante y cuando se cae le pega el travesaño en la nuca. Tenemos un servicio de urgencias que es del hospital local, fue la ambulancia, pero ya no había nada que hacer", aseguró.
El dirigente descartó que los arcos estuvieran en mal estado: "Estaban clavados. Es una tragedia que uno no sabe por qué se da. En una cancha de fútbol se respira vida y nadie pensó que se pueda encontrar la muerte", lamentó.
Serra dijo que en la comunidad local "estamos todos sorprendidos por esta desgracia y tragedia. Fue una fatalidad", a la que se suma que el padre de la víctima "es colaborador del club. No tenemos consuelo", sostuvo. En tanto, uno de los testigos del hecho dijo al diario El Litoral que "los chicos alcanzaron a decirle "cuidado" a Agustín cuando el arco se desplomaba, pero fue inevitable".
Ante el deceso del niño, la Liga Casildense suspendió la fecha del fin de semana en todas sus divisiones. El 22 de diciembre pasado, otro niño de siete años había falleció tras ser aplastado en Entre Ríos por un arco de fútbol de hierro movible.
En esa ocasión, el accidente tuvo lugar en la localidad de Los Conquistadores, en el Departamento Federación, al norte de la provincia de Entre Ríos.
Según se informó, el niño jugaba con sus amigos en una cancha de fútbol, circunstancia en la que el hierro se desplazó sobre su cuerpo, que resultó aplastado y con severas lesiones en los pulmones y zona hepática. El arco metálico tenía dos metros de alto por cinco metros de ancho y, al parecer, alguno de los otros chicos se habría colgado del travesaño, lo que provocó su caída.
La víctima fue llevada a Concordia, donde falleció una hora después de ingresar al hospital Masvernat de esa ciudad.
Fuente: DYN
