La modelo australiana tatuada Dani Lugosi protagonizó la última protesta de la asociación de Gente por el Tratamiento Ético a los Animales (PETA, su sigla en inglés), en repudio a la utilización de las pieles de los animales para prendas de vestir.
En medio de la lluvia, la modelo se ubicó frente al shopping de Pitt Street (en Sidney, Australia), cubierta sólo por sus tatuajes y un par de zapatillas. Sostenía un cartel que rezaba "tinta, no visón" ("Ink, not mink"), como un llamado a tatuarse en lugar de usar pieles de animales y "dejar las pieles a sus dueños originales".
Lugosi comenzó a preocuparse por el tratamiento inhumano que la industria de la moda tiene con los animales cuando vio un video de conejos siendo despellejados, según contó al diario local Sidney Morning Herald.
La protesta es una de las tantas que realiza PETA por los derechos de los animales, que suelen ser protagonizados por mujeres desnudas, ya sea para repudiar las corridas de toros en España, criticar la caza de ballenas en Japón, opromover el vegetarianismo,