El presidente Alberto Fernández fue uno de los participantes este jueves en Buenos Aires de un acto político-literario junto a los expresidentes boliviano Evo Morales y de Ecuador Rafael Correa, en el que se presentó en nuestro país el libro “Evo: Operación Rescate. Una trama geopolítica en 365 días”, de Alfredo Serrano Mancilla.
Allí fueron varios los oradores, y al hacer uso de la palabra Fernández dejó algunas frases de impacto, como cuando le dijo a Morales que "debía admitir que tenía sana envidia" por la lealtad "mantuvo en todo momento" su vice cuando se produjo el golpe en noviembre de 2019, Alvaro García Linera, también presente en el acto realizado en la Embajada de México.
También apuntó en forma crítica a la Corte Suprema de Justicia, cuando en otra parte de su discurso Fernández señaló que "Brasil tuvo la suerte que hasta aquí no hemos tenido nosotros, de contar con una Corte digna, capaz de auto revisarse...". Hablaba de la libertad de la goza hoy el ex presidente Lula da Silva.
Entre los presentes se encontraban el autor del libro, el académico español Alfredo Serrano Mancilla, el expresidente ecuatoriano Rafael Correa, el canciller Santiago Cafiero, el ministro de Cultura Tristán Bauer, la titular de la cartera de Género Elizabeth Gómez Alcorta, el de Turismo Matías Lammens, de Defensa Jorge Taiana, el Premio Nobel de la Paz Adolfo Pérez Esquivel, y el ex vicepresidente Amado Boudou, entre otros.
"Este libro habla de lo que pasó en Bolivia, pero también habla de lo que pasó en Ecuador, y de lo que pasó en Argentina", dijo Fernández en su discurso, indicando que "hubo un tiempo en que se difundió en América Latina la idea de terminar con un momento de unidad y de prosperidad en todo el continente, y se usaron las peores herramientas, las de la difamación y la persecución judicial".
Qué hace en Buenos Aires un avión sancionado de PDVSA proveniente de Cochabamba
Luego recordó cuando le pidió al presidente Mauricio Macri que le otorgara asilo a Evo Morales cuando el golpe de 2019: "Le dije al Presidente de entonces que había que darle asilo (a Morales, tras el golpe de Estado en Bolivia) y me respondió 'no me metas en este lío, voy a tener a toda la izquierda argentina todo el día frente a la casa de Evo'", expresó Fernández.
Fue cuando destacó que las gestiones para refugiar a Morales avanzaron gracias a otros presidentes latinoamericanos, como Andrés Manuel López Obrador (México) y Mario Abdo (Paraguay). lo cual permitió -dijo- "preservar la vida de Evo de la peor maldad".
Sobre el final del discurso el Mandatario argentino, para elogiar a García Linera, señaló "Evo esta es tu casa, la Argentina es tu casa, acá te queremos, acá te respetamos, te valoramos, somos hermanos tuyos, admiro en lo personal tu sapiencia, que debe tener que ver con lo milenario de tu pueblo también y tengo una sana envidia por el compañero que tenés, cuya lealtad ha sido puesta a toda prueba y jamás defeccionó, estoy hablando de Alvaro...".
Allí hubo aplausos y García Linera, sentado en primera fila, agradeció el elogio: "Yo siento que a Evo no lo salvó ni Alberto Fernández, ni Manuel López Obrador, fuimos instrumentos de una voluntad de un pueblo que lo cuidó y lo ayudo a salir", señaló Fernández.
En ese sentido, recordó que cuando participó en Bolivia de la asunción del actual presidente, Luis Arce, le "impresionó como me agradecían haberle salvado la vida a Evo. A Evo lo salvaron ellos, cada boliviano y cada boliviana".
Antes de Alberto Fernández, habló el expresidente de Bolivia y líder del Movimiento al Socialismo (MAS), quien afirmó que sufrió un golpe de Estado en 2019 de Estados Unidos por "el litio" que su gobierno había nacionalizado y estaba comenzando a industrializar y a exportar.
"Estados Unidos no acepta que los movimientos indígenas puedan encabezar una transformación, el imperio no acepta que podamos establecer un nuevo modelo económico, pero hemos demostrado que se puede, que otro mundo es posible y que otra Bolivia es posible", dijo Morales.
HB / ds
