La Ciudad quiere reactivar el modo presencial para la educación. Por ello, la ministra de Educación porteña, Soledad Acuña, le presentó hoy a su par nacional, Nicolás Trotta, un plan para el retorno a clases en el espacio público: los grandes parques y unas 48 plazas que solo se utilizan de manera parcial para recreación.
El protocolo que presentó Acuña supone tres ejes: el apoyo escolar y talleres de lectura en el espacio público, un programa denominado “la escuela en la calle” y la posibilidad de tomar exámenes para estudios terciarios. Todo en parques y plazas de la Ciudad.
En lo que refiere al apoyo escolar, según pudo saber PERFIL, se trata de los más de seis mil quinientos alumnos que calculan en el Gobierno porteño que perdieron todo contacto con la educación formal. También, la posibilidad de que alumnos de educación privada con problemas similares puedan ocupar parte del espacio público para el mismo fin: retomar la educación presencial.
Por su lado, la chance de que se abran talleres de lectura para estudiantes de primer grado de gestión estatal y privada. Según un documento técnico de Educación se trata de aquellos que “poseen menor grado de autonomía para el aprendizaje y requieren de mayor acompañamiento”.
Por otra parte, el programa “La escuela en la calle” supone estudiantes de quinto y sexto año de la secundaria para que puedan terminar su ciclo lectivo y puedan recibirse.
Y finalmente los espacios evaluativos para la educación superior para estudiantes que también están en condiciones de recibirse. En otras palabras: alumnos terciarios a punto de finalizar sus estudios que requieran exámenes finales prácticos.
En cuanto a los espacios públicos, el protocolo supone:
. El uso de 9 a 12 horas (para chicos de primer grado que empiezan a aprender a leer) y de 10 a 12 horas (alumnos de quinto y sexto año)
. Una plaza por barrio y en turnos.
. Grupos de 10 personas (dos adultos y ocho estudiantes) con un representante del ministerio al ingreso.
. La idea es que los grupos concurran dos veces por semana.
"No nos podemos resignar a terminar el año sin que los chicos vuelvan a clase. La escuela no es solo un espacio físico, un aula con pupitres. Hoy hay muchos chicos, chicas y sus familias que están alejados de esa contención. Tenemos que recuperarla, todavía estamos a tiempo", expresó Acuña, tras salir de la cumbre con Trotta.
Ahora le tocará al Gobierno nacional aprobar el protocolo que presentó la Ciudad.