El abogado de la anestesista Nélida Inés Puente, que estuvo presente en el estudio endoscópico en el que falleció la periodista Débora Pérez Volpin, aseguró que el trabajo de su representada fue "impecable". Puente es la principal imputada en la causa por "homicidio culposo" que intruye el juez Gabriel Omar Ghirlanda y que investiga las circunstancias de la muerte de la legisladora porteña.
En este sentido, el letrado Eduardo Gerome afirmó que "no hubo ningún tipo de error en el tratamiento anestésico", y remarcó el hecho de que Puente se presentó de inmediato ante la Justicia para colaborar en la investigación.
"Débora estaba internada desde hacía un día en el Sanatorio de la Trinidad y fue necesario hacerle el estudio endoscópico con sedacion", relató el abogado en América24 y continuó: "a los pocos minutos, empieza a tener una brusca caída en la saturación de oxígeno, es decir, no podía respirar".
Tras esto, Gerome contó que se procedió a una reanimación en la cual colaboraron cardiólogos y médicos de terapia intensiva, pero al no tener éxito "se produce el fallecimiento".
Al ser consultado sobre el desempeño de Puente, aseguró: "Desde un punto de vista anestésico estuvo impecable, se produjo algo ajeno a esa actividad, y eso debe ser motivo de averiguación".
Asimismo, destacó que la condición de salud de Débora Pérez Volpin era "perfecta". "Estaba impecable, se acababa de hacer un electrocardiograma, y tenía una condición cardiológica perfecta", recalcó.
Sobre los riesgos de la anestesia que se utilizó en la intervención, Gerome afirmó que "no hay nada que pueda fallar en la sedación en una persona que esta perfecta", dejando entrever una posible patología preexistente.
Y finalmente lanzó: "Yo solo puedo determinar que, como me contó mi representada, ella ha tenido una actuación conforme al protocolo para ese tipo de estudios".
