Italia despliega sus velas en Buenos Aires: llegó "Amerigo Vespucci", el barco más hermoso del mundo
La prestigiosa y venerada nave escuela italiana, con 93 años muy bien llevados, se encuentra desde este fin de semana y por unos días en la capital argentina. El arribo al puerto de la ciudad de la embarcación considerada “la piu’ bella del mondo” fue recibido con una ceremonia que tuvo lugar en el marco de una nueva etapa de las relaciones entre la Argentina e Italia. El fortalecimiento del diálogo bilateral eje de la iniciativa.
"Amerigo Vespucci" en el puerto de Buenos Aires |
X/ItalianNavy
Por Martino Rigacci
Tuvo toda la magia del cine italiano la presentación de la Amerigo Vespucci, que en vista de completar su segundo periplo alrededor del mundo tomó amarras ayer en el puerto de Buenos Aires.
En una noche veraniega, y favorecido por su belleza, el estilizado velero italiano acaparó las miradas durante un acto de bienvenida en el que varios de los participantes se refirieron a la Vespucci como a “una señora de 93 años”.
El buque, que ya había visitado Buenos Aires en el 1952, cuenta con una larga historia a sus espaldas: es la unidad más antigua de la Marina Militar Italiana visto que navega desde hace ya casi un siglo. Su diseño –tres mástiles, una longitud de 101 metros y una tripulación de más de 400 hombres y mujeres- se inspira en los navíos del siglo XVIII y principios del XIX de la Marina Real del Reino de las Dos Sicilias.
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Con su península enclavada en el Mediterráneo a Italia no le falta por cierto tradición y experiencia de mar. Hace ocho meses la ‘señora Vespucci’ zarpó para su viaje alrededor del mundo desde el puerto de Génova, una de las poderosas ‘Repúblicas Marineras’ italianas de un pasado lejano junto a Amalfi, Pisa y Venecia.
Durante la ceremonia hubo discursos oficiales a nivel bilateral Argentina-Italia, himnos, videos y una breve demostración del trabajo de los marinos a bordo. Tampoco faltó la música: la fanfarria de un regimiento de los ‘Bersaglieri’ se lució en una original interpretación con ritmo jazz de ‘O sole mio’ y ‘Volare’, dos temas que siguen siendo sinónimo de la música italiana.
La aluvional inmigración peninsular a la Argentina fue una suerte de telón de fondo del evento, que tuvo lugar en el apostadero naval del puerto a dos pasos del Museo de la Inmigración: “La presencia del navío en la Argentina tiene un importancia que quizás no haya en otros países: la ruta que hizo la Vespucci es la misma realizada por miles, sino por millones, de italianos para llegar hasta aquí, el lugar donde construir su futuro y el futuro de este país”, destacó el embajador de Italia en la Argentina, Fabrizio Lucentini.
“Reducir la profundidad de las relaciones bilaterales solo a una historia de inmigración -precisó- sería equivocado, en el país hay 250 empresas italianas que generan riqueza, que han invertido en la nación y en las que trabajan unos 50 mil italo-argentinos. En la cultura e historia de este país hay mucha Italia, hecho que es fundamental. Sin embargo, lo más importante es que este enorme capital pueda crear nuevas relaciones”, indicó el diplomático, tras recordar la reciente visita del presidente Javier Milei a Roma.
“Este encuentro tiene un peso político, hacía años que no veíamos a ministros o a jefes de gobierno presentes en la Argentina para intentar reforzar las relaciones”, destacó por su parte Daniela Santanché, ministra de Turismo de Italia, sector que “representa el 13% de nuestro PBI”. “La visita, añadió, tiene por otra parte lugar mientras lamentablemente en el mundo hay diferencias, contraposiciones, guerras. Ninguno de nosotros podía imaginarse vivir un período como el que estamos viviendo”.
“Estamos en la Argentina porque a través de la Vespucci hablamos de Italia y también porque queremos aumentar el turismo de los italianos en la Argentina”, concluyó la ministra al término del acto al destacar la importancia de “la reciprocidad e intercambio entre los países”.
A la ceremonia participaron también el subsecretario del ministerio de la Defensa, Matteo Perego di Cremnago, el Ceo de la sociedad Difesa Servizi, Luca Andreoli, el almirante Pietro Covino, el comandante del navío Giuseppe Lai y Daniel Scioli, secretario de Turismo, Ambiente y Deportes: “es importante, señaló Scioli, que los argentinos visiten Italia y al mismo tiempo que los italianos vengan a nuestro país para reencontrarse con sus familiares y nuestra cultura”.
El arribo del buque, que podrá ser visitado por el público en días y horarios indicados, está acompañado por actividades en diferentes áreas. En la organización de estas iniciativas participan la Embajada y el Consulado General en Buenos Aires, la Agregaduría de Defensa, el Instituto Italiano de Cultura de Buenos Aires y la Agencia ICE.
