El secretario de Derechos Humanos de la Nación, Horacio Pietragalla, fue escrachado el miércoles 13 de octubre durante su visita a San Rafael, Mendoza, con motivo en el acto por el aniversario de la muerte de un joven oriundo de la provincia de Buenos Aires.
Dicho homenaje tuvo lugar en el destacamento policial donde Sebastián Bordón (19) fue víctima de la policía 24 años atrás. En su memoria, se instaló una placa en la banquina de la ruta donde fue hallado el cuerpo del bonaerense.
Fue durante aquel tributo que el secretario de Derechos Humanos de la Nación, mientras caminaba entre la multitud, comenzó a ser objeto de gritos y abucheos. Un grupo de vecinos se acercaron al funcionario y, al unísono, entonaron: “Que se vaya”.
Miguel Sánchez, comisario de la zona, detalló que entre los vecinos de la localidad El Nihuil y Pietragalla tuvieron lugar "una serie de inconvenientes, insultos y malos tratos que, gracias a Dios, no llegaron a mayores. Nada tuvo que lamentarse".
Al acto conmemorativo también acudió la mamá de Sebastián, Miriam Medina, junto a sus compañeras de la Asociación “Madres en Lucha”, que agrupa a mujeres cuyos hijos e hijas fueron víctimas de la violencia institucional, y Damián Bordón, hermano del joven.
Una vez culminó el escenario de tensión, Pietragalla explicó: “La política de señalizaciones que estamos llevando adelante en todo el país no queda sólo en un cartel, desde la Secretaría estamos asistiendo a las familias de las víctimas como nunca".
Horacio Pietragalla, irónico en Formosa: "¿Te pensás que estoy disfrazado así para el carnaval?"
"Estamos participando de las querellas, impulsando la ley contra la violencia institucional. Queremos generar un antes y un después, pero todo esto se debe a las Madres en Lucha, que con su ejemplo nos mostraron el camino", concluyó.
El cadáver de Bordón fue encontrado el 12 de octubre de 1997 en un cañadón, a dos kilómetros del destacamento policial de El Nihuil, tras diez días intensos de búsqueda. durante aquella jornada, el muchacho estaba de viaje de egresados cumplía 19 años.
Por el homicidio y por el encubrimiento del asesinato del joven estudiante el juez Waldo Yacante procesó en noviembre de 1997 a siete policías y a dos civiles. En esa época, el crimen había puesto en jaque al gobernador Arturo Lafalla.
También provocó la caída del secretario de gobierno provincial y de toda la cúpula de la policía mendocina. La policía detuvo y mató a Bordón y el caso intentó ocultarse. Tras cometerse el crimen, el cuerpo fue arrojado a un barranco y se inventaron coartadas.
JFG / ED
